MATANZAS, Cuba, 9 ago (Reuters) -Los bomberos entraron el martes por primera vez en el área de un enorme incendio para echar espuma y agua sobre los restos del siniestro, que destruyó un 40% de la principal instalación de almacenamiento de combustible de Cuba, en un accidente que las autoridades califican como el peor en la isla.

"Hemos llegado hoy a estar en forma de ir controlando el incendio", dijo desde el lugar Rolando Vecino, jefe de transporte del Ministerio del Interior, a la televisión estatal.

Testigos de Reuters informaron que las furiosas llamas que devastaron desde el viernes un segmento de cuatro tanques del puerto de tanqueros en Matanzas se habían extinguido, mientras imponentes columnas de un denso humo negro comenzaron a disminuir y ahora en su mayoría eran grises.

Matanzas es el puerto más importante de Cuba para recibir importaciones de crudo y combustibles. El crudo pesado cubano, así como el fuel oil y el diésel almacenados en esa occidental provincia en 10 enormes depósitos se usan principalmente para generar electricidad en la isla.

Un rayo golpeó el viernes un tanque de almacenamiento de combustible. Y el fuego se extendió a un segundo depósito el domingo, envolviendo el lunes el área de cuatro tanques, mientras se escuchaban fuertes explosiones a pesar de los esfuerzos de los bomberos locales apoyados por más de 100 refuerzos de México y Venezuela.

El país caribeño, fuertemente sancionado por Estados Unidos se encuentra casi en bancarrota. Los apagones y la escasez de gasolina y otros productos básicos han originado tensión, llevando a una serie de protestas locales dispersas tras los disturbios históricos de julio de 2021.

El martes, más helicópteros se sumaron a los esfuerzos para apagar el fuego, además de dos barcos de bomberos enviados por México junto con un equipo pesado contra incendios.

El gobierno cubano no ha dicho cuánto combustible se ha perdido en el incendio.

Y afirmó que el petróleo no había contaminado la cercana Bahía de Matanzas, aunque advirtió a los residentes de lugares tan lejanos como La Habana que usaran máscaras faciales y evitaran la lluvia ácida debido a la enorme columna de humo que generó el incendio.

Un bombero murió y 14 desaparecieron el sábado cuando explotó el segundo tanque, dijeron las autoridades el martes, corrigiendo una cifra anterior de 16 desaparecidos.

Mario Sabines, gobernador de la provincia de Matanzas, a unos 130 kilómetros de La Habana, dijo sobre las llamas que eran como una "antorcha olímpica" de un tanque a otro, convirtiendo cada uno en un "fogón".

(Reporte de Nelson Acosta, Marc Frank; reporte adicional de Nelson González y Mario Fuentes, en Matanzas.Editado por Manuel Farías.)