La semana pasada advertimos de una posible incursión del índice dólar por encima de sus máximos de 2023 en 107,35. "El análisis de Fibonacci, por su parte, permite afinar y sugiere una posible incursión hasta los 108,00, sin descartar la perspectiva de una mayor consolidación". El índice acaba de alcanzar 108,07 y parece mostrar signos de calma -gracias, Scott- que necesitan confirmarse con una ruptura en 106,14. Ahora, el escenario más probable sería que se mantuviera dentro de la indecisión que lo ha caracterizado durante los dos últimos años, con la posibilidad de un retorno hacia el límite inferior. Esta hipótesis agresiva tendría que coincidir con una reanudación de la actual tendencia bajista de los rendimientos de los bonos estadounidenses (como explicamos en este artículo).
Fuente: Bloomberg
Al mismo tiempo, vigilaremos los 1,0335 para detener la hemorragia del EUR/USD, mientras que la resistencia inicial se sitúa en 1,055/66.
El USD/JPY parece calmarse tras acercarse a 156,84, pero estaremos atentos a 151,50 como soporte inicial a la baja, cuya ruptura será la única forma de confirmar que la tendencia alcista en curso desde el pasado mes de septiembre se ha detenido. Lo mismo puede decirse del par USD/CHF, con una zona de resistencia inicial en torno a 0,8963/0,9016 y un soporte inicial en 0,8820.
En cuanto a las divisas de materias primas, el AUD/USD está intentando rebotar por encima de 0,6428, pero necesita superar 0,6555 para abrir cualquier posibilidad real de rebote, mientras que el NZD/USD está tanteando el soporte en 0,5850 con una resistencia inicial en 0,5944.