Las mercancías fabricadas por Sime Darby Plantation tienen bloqueada la entrada en Estados Unidos desde 2020 por sospechas de prácticas laborales abusivas. El año pasado, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP) dijo que tenía información suficiente de que la empresa utilizaba "mano de obra forzada" y que las mercancías estaban sujetas a confiscación.

En respuesta, Sime Darby Plantation nombró a una consultoría de comercio ético para que auditara sus instalaciones y el año pasado reservó unos 20 millones de dólares para compensar a los trabajadores migrantes actuales y antiguos que pagaron comisiones de contratación para asegurarse un puesto de trabajo en la empresa.

La CBP, citando información adicional que había recibido, dijo el jueves que ahora había "determinado que los productos ya no se extraían, producían o fabricaban total o parcialmente con el uso de mano de obra convicta, forzada o en régimen de servidumbre por parte de la Plantación Sime Darby".

El CBP no indicó qué pruebas había recibido ni si se había levantado la prohibición de las importaciones de la empresa. La agencia no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

Sime Darby dijo que estaba al corriente de la notificación estadounidense.

"Somos optimistas en cuanto a que los enormes avances que hemos realizado para mejorar la calidad de vida de nuestra mano de obra pronto serán reconocidos por la USCBP y que se nos permitirá reanudar las exportaciones a Estados Unidos", declaró un portavoz en un correo electrónico enviado a Reuters.

Sime Darby Plantation es una de las ocho empresas malasias que han sido prohibidas por Estados Unidos en los últimos cuatro años por acusaciones de trabajos forzados.

Malasia anunció en 2021 un plan gubernamental para eliminar para 2030 prácticas abusivas como la servidumbre por deudas, los dormitorios antihigiénicos para los trabajadores y las horas extraordinarias excesivas.