La inflación en la región del BERD, que abarca unas 40 economías que van desde Kazajstán hasta Hungría y Túnez, alcanzó una media del 16,5% en julio, un nivel visto por última vez en 1998, según el último informe del banco publicado en septiembre.

Los precios del gas en Europa son 2,5 veces más elevados que en 2021, debido a la reducción de los suministros de Rusia y a algunas interrupciones en los envíos desde Ucrania. Se espera que las presiones inflacionistas sigan aumentando, ya que los precios de los productores van por delante de los precios de los consumidores.

"Los hogares todavía no han afrontado en toda su extensión el impacto del aumento de los costes energéticos, ya que los gobiernos han estado amortiguando esta carga", dijo a Reuters la economista jefe del BERD, Beata Javorcik. "Se avecina más dolor".

Polonia, Croacia y Montenegro son algunos de los países que están aplicando subsidios a la energía que van desde recortes fiscales hasta pagos únicos para mitigar el impacto de la guerra de Rusia en Ucrania en los precios de la energía.

El consumo de gas tendría que ser "fuertemente restringido a corto plazo" si los suministros de Rusia a Europa se cortan completamente, dijo el BERD, aunque el escenario de caso base del banco fue modelado con "interrupciones significativas".

Aunque los alimentos han sido un importante motor de la inflación en la región del BERD, Javorcik no esperaba que esto desencadenara disturbios sociales, y señaló que los precios del trigo volverían a los niveles vistos por última vez antes de que Rusia invadiera Ucrania el 24 de febrero, según el informe.

EL CRECIMIENTO PIERDE FUERZA

El banco estimó que las economías de toda la región crecerán un 2,3% en 2022 - 120 puntos básicos por encima de su previsión de mayo - gracias a un primer semestre más fuerte en el que los hogares gastaron los ahorros acumulados durante los cierres de COVID-19 a pesar de la caída de los salarios reales.

Sin embargo, la reducción del suministro de gas de Rusia llevó al banco a recortar las previsiones de crecimiento para 2023 hasta el 3% desde una previsión anterior del 4,7%.

Se prevé que el PIB de Ucrania se contraiga un 30% en 2022, mientras que la economía rusa se contraerá un 5% en lugar del 10% previsto anteriormente.

"No es ningún secreto que las sanciones sobre la energía no han sido tan eficaces", dijo el economista jefe.

El crecimiento de Turquía, el mayor receptor de fondos del BERD, se ha revisado al alza hasta el 2,5% desde el 2% para 2022, mientras que el crecimiento del próximo año se confirmó en el 3,5%.

El informe señaló que el 88% de los bancos centrales de la región del BERD subieron los tipos de interés entre mayo de 2021 y julio de 2022.

Javorcik afirmó que "puede quedar un cierto margen para las subidas" en respuesta a las presiones inflacionistas, pero mucho dependerá de la incertidumbre sobre el suministro de energía y de una desaceleración económica ya en marcha.