La esperada lectura de la reunión de la Fed del 1 y 2 de noviembre mostró que los funcionarios estaban en gran medida satisfechos de poder moverse ahora en pasos más pequeños.

"Creo que ahora es casi seguro que veremos al FOMC ralentizar su ritmo de endurecimiento a partir de diciembre", dijo Carol Kong, estratega de divisas del Commonwealth Bank of Australia (CBA).

El índice del dólar, que mide el billete verde frente a los seis principales pares, bajaba un 0,066% a 105,830, después de haber caído un 1% durante la noche.

Este mes, la Reserva Federal subió su tipo de interés clave en tres cuartos de punto porcentual por cuarta vez consecutiva, en un esfuerzo por controlar una inflación asfixiante.

Pero los datos de los precios al consumo en Estados Unidos, ligeramente más fríos de lo esperado, han avivado las esperanzas de un ritmo de subidas más moderado. Esas esperanzas han hecho que el índice del dólar se desplome un 5,1% en noviembre, lo que le sitúa en la senda de su peor rendimiento mensual en 12 años.

Los estrategas de Citi afirmaron que todavía existe una gran incertidumbre en torno a la subida de los tipos, a pesar del consenso de que los tipos subirán más lentamente.

Las actas también mostraron un debate emergente dentro de la Fed sobre los riesgos que un rápido endurecimiento de la política podría suponer para el crecimiento económico y la estabilidad financiera. Al mismo tiempo, los responsables de la política económica reconocieron que ha habido pocos avances demostrables en materia de inflación y que los tipos aún deben subir.

Los datos del miércoles mostraron que la actividad empresarial estadounidense se contrajo por quinto mes consecutivo en noviembre, con una medida de nuevos pedidos que cayó a su nivel más bajo en 2 años y medio, ya que los tipos de interés más altos frenaron la demanda.

Sin embargo, Kong, de la CBA, advirtió que los mercados son demasiado optimistas respecto a un posible fin inminente del ciclo de endurecimiento y señaló que todavía existe un fuerte apoyo para el dólar estadounidense debido a las políticas chinas de cero-COVID.

El aumento de los casos de coronavirus ha llevado a las ciudades chinas a imponer más restricciones, lo que ha aumentado la preocupación de los inversores por la economía y ha frenado el apetito de riesgo.

El dólar australiano subió un 0,25% frente al billete verde, hasta los 0,675 dólares, mientras que el kiwi subió un 0,26%, hasta los 0,625 dólares.

El euro subía un 0,23%, a 1,0419 dólares, mientras que la libra esterlina cotizaba por última vez a 1,2083 dólares, con una subida del 0,26% en el día. La libra subió un 1,4% durante la noche después de que los datos preliminares de la actividad económica británica superaran las expectativas, aunque siguieran mostrando una contracción.

El yen japonés se fortaleció un 0,54% frente al billete verde, situándose en 138,84 por dólar.

Los mercados estadounidenses estarán cerrados el jueves por el Día de Acción de Gracias y es probable que la liquidez sea más escasa de lo habitual.