Alemania, la cuarta economía del mundo, se está preparando para todos los escenarios, incluido el cese total de los suministros de gas ruso una vez que finalice un periodo de mantenimiento regular de 10 días en el gigantesco gasoducto Nord Stream 1.

El mantenimiento del gasoducto, que transporta el gas ruso directamente a Alemania, comenzó el 11 de julio, pero Berlín está pensando en que el gas sea utilizado por el Kremlin para ejercer presión política sobre Occidente, algo negado por Moscú.

He aquí algunos de los riesgos en caso de que el periodo de interrupción se prolongue o de que el gasoducto vuelva a abrirse con caudales reducidos.

¿POR QUÉ ES TAN CRUCIAL EL NORD STREAM 1?

Es la mayor vía de entrada de gas ruso en Alemania, ya que aporta 55.000 millones de metros cúbicos (bcm) al año. Alemania consumió 100 bcm el año pasado.

Los tránsitos de gas ruso a través de Polonia se han detenido este año y los que pasan por Ucrania se han visto reducidos por la guerra.

La mitad de los hogares alemanes dependen de la calefacción de gas, sobre todo de octubre a marzo, y la no reapertura del Nord Stream 1 echaría por tierra los planes de llenar los depósitos de gas subterráneos antes del invierno.

En teoría, las cavernas podrían satisfacer la demanda nacional durante dos meses y medio, pero sólo están llenas en un 64,6%, frente al objetivo del 80% fijado para el 1 de octubre.

Mientras tanto, el mercado de los orígenes del gas alternativo es escaso en todo el mundo y los precios se han disparado desde el año pasado al recuperarse la demanda tras la pandemia. [NG/UE]

¿CÓMO Y CUÁNDO LIMITARÍA ALEMANIA EL GAS A LOS CONSUMIDORES?

Si Alemania aprieta el gatillo de la fase de emergencia de un plan de escalada en tres etapas, el regulador de la red Bundesnetzagentur se encargaría de garantizar una distribución justa del gas.

La etapa se desencadenaría por una demanda de gas excepcionalmente alta o por una interrupción significativa del suministro, por ejemplo si el Nord Stream 1 permaneciera cerrado.

Alemania se encuentra en la segunda etapa desde el 23 de junio, después de que los volúmenes de Nord Stream 1 cayeran al 40% de su capacidad.

¿QUÉ SECTORES CORREN MÁS RIESGO?

Los productores de productos químicos, acero, vidrio y papel son los principales consumidores industriales de gas en Alemania, pero los efectos se extenderían hasta la producción de alimentos y porcelana.

La industria del aluminio, con unas ventas de 22.000 millones de euros y 60.000 empleados, depende del gas para su fundición y reciclaje.

En la industria papelera, con una facturación de 15.500 millones de euros y 40.000 empleados, los operadores afirman que el papel y el cartón son vitales para los alimentos, los medicamentos y los artículos de higiene.

¿QUÉ ESTÁN HACIENDO LAS EMPRESAS?

El mayor importador de gas de Alemania, Uniper, ha solicitado un rescate gubernamental que, según una fuente política, asciende a 9.000 millones de euros, y otras empresas de servicios públicos podrían enfrentarse a problemas similares.

El principal fabricante de acero, Thyssenkrupp, está elaborando planes para las interrupciones, según un portavoz, ya que no es posible utilizar petróleo o carbón en lugar de gas. Si se deniegan algunas asignaciones mínimas, las plantas de Thyssenkrupp podrían tener que cerrar y es posible que se produzcan daños técnicos en los agregados.

Cortar el suministro de gas a las plantas de aluminio, incluso en un 30%, significaría que la mitad de ellas se quedarían paradas, afirma el grupo industrial Aluminium Deutschland. Los principales actores son Hydro Aluminium, Speira y Trimet.

El gigante químico BASF necesita mantener un suministro de gas de alrededor del 50% de su demanda máxima y una interrupción de los flujos rusos activaría un plan de emergencia en toda la empresa.

Las principales empresas papeleras son Stora Enso, UPM y Mitsubishi Hitec Paper Europe.

¿QUÉ PODRÍA PASARLE A LA ECONOMÍA?

En la predicción más sombría hasta la fecha, el grupo industrial bávaro vbw dijo que el país podría perder un 12,7% de su rendimiento económico en la segunda mitad de 2022 en caso de que se interrumpiera por completo el suministro de gas ruso.

¿CUÁLES SON LOS RIESGOS SOCIOPOLÍTICOS?

Las luchas sociales en torno al gas podrían dar un impulso a los populistas de la extrema derecha y la extrema izquierda del espectro político, erosionando potencialmente el discurso racional sobre cómo proceder.

Berlín ha aprobado una ley que mantiene abiertas las opciones de repercutir directamente los precios desorbitados o, alternativamente, tratar de distribuir las subidas de forma más generalizada entre los usuarios.