Los incidentes, uno de los cuales marcó la segunda muerte este año de un contratista, llegan en un momento decisivo para las empresas de servicios petroleros que se esfuerzan por contratar trabajadores para reanudar algunas operaciones. Los recortes de puestos de trabajo de hace dos años relacionados con la pandemia de COVID-19 han provocado una escasez de empleados experimentados en los campos petrolíferos.
La paralización se produce después de dos accidentes laborales ocurridos en pocos días en los centros de producción gestionados por la unidad de esquisto de Exxon y se produce en un momento en el que Exxon se enfrenta a múltiples demandas por negligencia.
Un trabajador resultó herido en el oeste de Texas este mes y un trabajador de Axis Energy Services que realizaba trabajos de reparación murió el pasado martes en el este de Texas. En marzo, una mujer murió aplastada en otro emplazamiento del oeste de Texas operado por Exxon.
"La seguridad y la salud de nuestros trabajadores es siempre nuestra máxima prioridad. Cada vez que hay un incidente, redoblamos nuestros esfuerzos para reforzar la seguridad", dijo Exxon en respuesta a las preguntas sobre la paralización.
El principal productor de petróleo de Estados Unidos también dijo que estaba trabajando activamente con los contratistas para mejorar la seguridad.
La paralización no afectó a la producción de petróleo, dijo Exxon, pero se detuvo la actividad durante los trabajos de mantenimiento en un emplazamiento tras el accidente mortal de la semana pasada, según informó Reuters la semana pasada.
Los ejecutivos del sector del petróleo y el gas han señalado que la falta de trabajadores cualificados afecta a sus operaciones en una encuesta del Banco de la Reserva Federal de Dallas publicada esta semana.
"Estamos viendo un mayor porcentaje de contrataciones que son nuevas en la industria", dijo un ejecutivo, lamentando la disponibilidad de gente cualificada.
Exxon o su filial de esquisto XTO Energy se han enfrentado este año a al menos seis demandas por negligencia derivadas de lesiones en el oeste de Texas, según las denuncias presentadas en el Tribunal de Distrito del Condado de Harris, en Houston. Cada una de las demandas busca una indemnización superior al millón de dólares.
La demanda más reciente fue presentada el 26 de agosto por un trabajador de un campo petrolífero golpeado por una tubería de perforación en el condado de Martin, Texas. Esa demanda siguió a otra presentada días antes por un trabajador herido tras quedar atrapado bajo un panel de pozo de 400 libras en el condado de San Augustine, Texas.
Uriel Tehy se lesionó mientras trabajaba en un pozo cerca de Carlsbad, Nuevo México, según una demanda presentada en un tribunal de Texas en la que se afirma que XTO no se aseguró de que el equipo en el lugar estuviera en buenas condiciones de funcionamiento.
Nuevo México multó a XTO con 2,25 millones de dólares este año por no cumplir con los requisitos relativos a cinco pozos de inyección subterráneos. Por separado, informó de 15 incendios en sus operaciones de Nuevo México, según el regulador petrolero del estado. El año pasado, informó de 22 incidentes de este tipo.
