El presidente del Banco Asiático de Desarrollo, Masatsugu Asakawa, también instó a los responsables políticos de Asia a estar atentos a las señales de cualquier salida brusca de capital impulsada por las constantes subidas de los tipos de interés en Estados Unidos.

"Ya estamos viendo el riesgo de un endurecimiento agresivo de la política monetaria estadounidense para luchar contra la inflación, que puede desencadenar reversiones bruscas de los flujos de capital o una fuerte depreciación de la moneda", dijo Asakawa en un mensaje de vídeo emitido en un foro de la ASEAN+3 celebrado en Singapur el viernes.

Georgieva dijo que las economías que componen la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) son un "punto brillante" en la economía mundial, con un crecimiento previsto del 5% este año y que se moderará ligeramente en 2023.

Pero advirtió que las perspectivas son "excepcionalmente" inciertas y están dominadas por riesgos, como las consecuencias de la guerra de Rusia en Ucrania, el endurecimiento financiero mundial y la ralentización del crecimiento de China.

"Otro desafío mundial acuciante es la inflación. Se espera que este año la media sea de sólo un 4% en Asia. Pero las presiones inflacionistas en la región están aumentando", dijo Georgieva.

"No sabemos cuánto durará este choque y si pueden venir otros. Pero tenemos que reconstruir y preservar los amortiguadores y estar preparados para utilizar plenamente nuestro conjunto de herramientas políticas", dijo en el mismo foro.

Las estrictas medidas de bloqueo de China han influido en el ya de por sí lento crecimiento mundial, ya que han frenado la actividad económica interna y han interrumpido las cadenas de suministro de los fabricantes de todo el mundo.

Las consecuencias de la desaceleración de China han sido especialmente dolorosas en Asia, donde la actividad de las fábricas se desplomó en toda la región en noviembre.

Algunas naciones emergentes también se han visto obligadas a subir los tipos de interés para combatir las salidas de capital provocadas por las subidas de tipos en Estados Unidos, a costa de perjudicar a sus frágiles economías.

En el foro, el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, dijo que no veía un riesgo significativo de que Asia se enfrentara a una pérdida repentina de confianza o a una nueva crisis financiera.

Sin embargo, advirtió contra la complacencia, ya que algunos países asiáticos vieron disminuir sus amortiguadores políticos, después de desplegar grandes paquetes de gastos para contrarrestar la pandemia del COVID-19.

"Como ha demostrado la reciente agitación del mercado en el Reino Unido, la reacción de los participantes en el mercado a las decisiones y anuncios de política podría afectar significativamente a los precios de los activos", dijo Kuroda, que fue jefe del BAD y máximo diplomático de Japón en materia de divisas.

"Los responsables políticos de la ASEAN deben estar atentos" a los riesgos y ofrecer "una comunicación clara, suficiente y oportuna para evitar resultados no deseados", dijo.