El gigante del entretenimiento sorprendió a los inversores a última hora de la noche del domingo al anunciar la destitución del presidente ejecutivo Bob Chapek y el nombramiento de Iger, de 71 años, con un contrato de dos años para devolver a la empresa al crecimiento.

El movimiento evocó otros compromisos de retorno como el de Steve Jobs a Apple y el de Howard Schultz a Starbucks en tiempos de crisis.

"El movimiento audaz (el regreso de Iger) puede parecer el correcto. Sin embargo, el negocio está en una fase diferente de crecimiento", dijo el analista de PP Foresight Paolo Pescatore, añadiendo que las medidas a corto plazo podrían incluir la restricción de algunas operaciones.

El objetivo más inmediato de eso podría ser Disney+, el servicio de streaming que Iger ayudó a lanzar en 2019. Las pérdidas en la unidad se duplicaron con creces en el último trimestre reportado hasta los 1.500 millones de dólares.

El negocio se ha convertido en un lastre para las ganancias, ya que Disney gasta mucho en contenidos para atraer a los suscriptores, poniendo a prueba la paciencia de los inversores y contribuyendo a una caída del 40% de sus acciones en lo que va de año.


GRÁFICO: Desencantado -


GRÁFICO: Las pérdidas de Disney en streaming se acumulan en los últimos 3 años -

"Disney+ ... probablemente podría hacerlo mejor con menos suscriptores finales formados por superfans dispuestos a pagar altas RPU (tarifas por usuario), lo que generaría márgenes mucho mayores", dijeron los analistas de MoffettNathanson.

También señalaron a ESPN como otro objetivo para los profundos recortes de costes, incluyendo una revisión de todos los próximos derechos deportivos a medida que la cadena pierde suscriptores de cable.

El inversor activista Dan Loeb's Third Point también había impulsado una posible escisión de ESPN cuando tomó una participación en la compañía en agosto, aunque posteriormente se echó atrás en la idea.

Algunos corredores de bolsa también han planteado su preocupación sobre si el periodo de dos años por el que Iger ha acordado volver sería suficiente para transformar el negocio y encontrar un sucesor.

"El problema es que Iger no puede quedarse para siempre. Ya hizo mal la transición a Tom Staggs en 2016 y ahora a (Bob) Chapek", dijo Rosenblatt Securities.

Aun así, las acciones de Disney subieron un 10% en las operaciones previas al mercado del lunes, una señal de confianza en el ejecutivo que dirigió la compañía durante 15 años.


GRÁFICO: Vuelve la magia -