Recortó drásticamente el impuesto sobre el crudo de producción local a 1.700 rupias (20,52 dólares) por tonelada desde las 4.900 rupias, con efecto a partir del viernes, según la orden.

El gobierno federal también recortó el impuesto a la exportación sobre el gasóleo a 5 rupias por litro desde 8 rupias, mientras que redujo el impuesto sobre el ATF a 1,5 rupias por litro desde 5 rupias, según el documento.

La medida se produce en medio de una caída del 14% del crudo mundial desde noviembre. India es el tercer mayor consumidor e importador de petróleo del mundo.

Mientras tanto, Reuters había informado de que India ha comprado barriles de crudo ruso muy por debajo del precio máximo de 60 dólares acordado por Occidente.

La demanda india de combustible subió en noviembre a un máximo de ocho meses, según mostraron los datos gubernamentales publicados la semana pasada.

El 1 de julio, India impuso el impuesto a los productores de crudo y gravámenes a las exportaciones de gasolina, gasóleo y combustible de aviación, después de que las refinerías privadas buscaran mercados exteriores para beneficiarse de los sólidos márgenes de refinado, en lugar de vender a precios inferiores a los del mercado en el país.

(1$ = 82,8600 rupias indias)