Las elecciones parlamentarias que siguieron a la disolución de la Asamblea Nacional por parte de Emmanuel Macron no han sentado nada bien en los mercados, sobre todo porque los dos bandos favoritos son el de extrema izquierda y el de extrema derecha.

Esta tensión se ha reflejado en los mercados de renta variable con un descenso de alrededor del 6% en el CAC40 desde el 9 de junio. Algunos inversores han reducido su exposición a Francia, por considerar que la visibilidad es actualmente demasiado baja para mantener sus inversiones en el país. En el mercado de renta fija, el diferencial de rentabilidad entre la deuda alemana -el Bund- y la francesa -la OAT- ha superado los 80 puntos básicos, alcanzando un nivel no visto desde 2017.

Por tanto, los mercados seguirán de cerca -y con ansiedad- estas elecciones, que entrañan temores económicos, fiscales, sociales y políticos para el futuro del país.

Mientras tanto, la batalla entre Izquierdazilla vs. Derechazilla continúa. Esperemos, sin embargo, que el campo de batalla dejado por este enfrentamiento no sea insalvable.

Dibujo de Amandine Victor para MarketScreener.