Poco después de que Rusia lanzara lo que llama una "operación militar especial" en Ucrania, Krispy Kreme suspendió todos los envíos de suministros e ingredientes para la elaboración de rosquillas a Rusia y puso fin al acuerdo con su único franquiciado ruso.

La cadena estadounidense fue una de las decenas de empresas occidentales que abandonaron el país y desde entonces han surgido otras aparentes imitaciones en las ciudades rusas, con Stars Coffee gestionando cafeterías que antes eran propiedad de Starbucks Corp y "World of Cubes" llenando el vacío dejado por el fabricante de juguetes danés Lego.

Una empresa propiedad del restaurador Arkady Novikov, antiguo socio de la franquicia Krispy Kreme, solicitó el registro de la marca Krunchy Dream a finales de septiembre, informó el lunes el diario RBC.

El Grupo Novikov y Krispy Kreme no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.

En una declaración de resultados financieros en agosto, Krispy Kreme dijo que había cerrado 30 tiendas de franquicia en Rusia.