Aun así, el ritmo de contracción fue algo más suave que el del mes anterior, mientras que también se vio a los fabricantes prepararse para un futuro mejor.

El índice de gestores de compras (PMI) desestacionalizado de S&P Global para los fabricantes surcoreanos se situó en 48,5 en enero, ligeramente por encima del 48,2 de diciembre, pero permaneciendo por debajo del punto neutro de 50 por séptimo mes consecutivo.

La marca de 50 separa la expansión de la contracción. Los niveles más altos indican tasas de cambio más rápidas que un mes antes.

Los nuevos pedidos se contrajeron por séptimo mes consecutivo en enero, aunque el ritmo de descenso fue algo más lento que un mes antes. El ritmo de contracción de los nuevos pedidos procedentes del extranjero también se suavizó, pero siguió siendo el segundo más rápido de su racha descendente de 11 meses.

La menor demanda de los clientes internacionales reflejó el aumento de los casos de COVID-19 en China continental, así como el impacto de la subida de los tipos de interés en el tipo de cambio, según la encuesta.

Como reflejo de la caída de los nuevos pedidos, la producción registró su mayor descenso en tres meses y las existencias de productos acabados aumentaron por primera vez en cuatro meses, según mostraron también los subíndices.

"Las perspectivas inmediatas del sector manufacturero surcoreano parecen difíciles", declaró Usamah Bhatti, economista de S&P Global Market Intelligence.

"Dicho esto, las empresas siguen confiando en que las condiciones económicas mundiales mejoren y estimulen la demanda".

El empleo aumentó por primera vez en cinco meses y al ritmo más rápido desde marzo de 2022, y los miembros del panel de la encuesta lo atribuyeron a la contratación previa a la vuelta al crecimiento de los nuevos pedidos.

También proporcionando apoyo a las empresas, el ritmo alcista de los precios de los insumos se suavizó hasta el nivel más débil desde diciembre de 2020, mientras que el empeoramiento de los plazos de entrega de los proveedores también se suavizó significativamente respecto al mes anterior, cuando se vieron afectados por una huelga de camioneros.

El optimismo de los fabricantes sobre la producción futura durante el próximo año mejoró significativamente en enero hasta el nivel más alto en cuatro meses, repuntando desde el mínimo de casi dos años y medio registrado en diciembre.