LONDRES, 19 ene (Reuters) - La inflación de los precios al consumo en el Reino Unido subió más de lo previsto, hasta el 5,4%, en diciembre, su nivel más alto en casi 30 años, según mostraron los datos oficiales el miércoles, presionando al Banco de Inglaterra para que vuelva a subir los tipos de interés el mes que viene.

Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que la tasa anual del IPC subiría desde el 5,1% de noviembre hasta el 5,2% en diciembre.

El aumento del IPC a su nivel más alto desde marzo de 1992 se debió a una amplia gama de bienes y servicios, dijo la Oficina de Estadísticas Nacionales. El mayor impacto provino de los alimentos y las bebidas, seguido de los restaurantes y los hoteles.

Sin embargo, los trastornos económicos provocados por la variante ómicron del coronavirus en diciembre solo tuvieron un impacto insignificante en la tasa de inflación general.

El mes pasado, el Banco de Inglaterra se convirtió en el primer gran banco central del mundo en subir los tipos de interés desde el inicio de la pandemia de COVID-19, un día después de que el IPC de noviembre alcanzara su máximo en 10 años.

El aumento de la inflación también se está convirtiendo en un problema político para el Gobierno del primer ministro Boris Johnson, que se enfrenta a las peticiones de la oposición y de las organizaciones benéficas para compensar una subida prevista del 50% en los precios regulados de la energía para los hogares en abril.

"Entiendo las presiones a las que se enfrenta la gente con el coste de la vida, y seguiremos escuchando las preocupaciones de la gente", dijo el ministro de Economía, Rishi Sunak, en respuesta a los datos.

El Banco de Inglaterra prevé que el IPC alcanzará en abril su nivel más alto en 30 años, en torno al 6%, debido a la subida de la factura energética, y que el IPC tardará más de dos años en volver a su objetivo del 2%.

¿VOLVERÁN A SUBIR LOS TIPOS?

Los mercados financieros ven muchas posibilidades de que el Banco de Inglaterra vuelva a subir los tipos el 3 de febrero y anuncie que reducirá su balance de 875.000 millones de libras (1,19 billones de dólares) de bonos del Estado a medida que los títulos empiecen a vencer.

Kitty Ussher, economista jefe del Institute of Directors, prevé que el BoE suba su principal tipo de interés al 0,5% desde el 0,25% el mes que viene, y que un aumento anual del 4,2% en los precios de los alimentos era especialmente llamativo.

"Esto no sólo proporciona pruebas adicionales de que la inflación se está convirtiendo en algo endémico y no transitorio, sino que también es un mal presagio para los hogares que se enfrentan a múltiples subidas del coste de la vida esta primavera", dijo.

Las cifras del miércoles mostraron que el IPC subyacente --que excluye los precios a veces volátiles de los alimentos, la energía, el alcohol y el tabaco-- aumentó hasta un récord del 4,2% en diciembre, frente al 3,9% de noviembre.

La inflación de los precios al por menor en general --una medida más antigua que, según la ONS, ya no es tan fiable, pero que sigue siendo ampliamente utilizada por el Gobierno y las empresas-- subió a un nuevo máximo de 30 años del 7,5% en diciembre, desde el 7,1% de noviembre.

Sin embargo, los datos de los precios de las fábricas mostraron indicios de que las presiones de los costes podrían haber alcanzado su punto máximo, mostrando una tendencia simlar de las encuestas realizadas a las empresas el mes pasado. Los precios cobrados por las fábricas se situaron un 9,3% por encima de los de diciembre de 2020, enfriándose desde el 9,4% de noviembre y marcando el primer descenso de la tasa anual desde julio de 2020.

La tasa de inflación de los costes pagados por los productores en concepto de material y energía también se redujo en diciembre, pasando del 15,2% al 13,5%.

(Reporte de David Milliken; edición de Andy Bruce y Kevin Liffey; traducido por Tomás Cobos)