Los inversores invirtieron 22.900 millones de dólares en acciones, dijo Bofa, citando datos de EPFR, y 4.200 millones de dólares en bonos.

Los analistas de Bofa dijeron que las creencias de Wall Street -que la Reserva Federal siempre parpadea, que las acciones siempre suben y que la tecnología siempre hace subir a las acciones- han sido desafiadas pero no vencidas.

El repunte de los flujos se produjo después de que los datos de la semana pasada mostraran que la inflación estadounidense se había enfriado más de lo previsto en octubre, lo que provocó un espectacular repunte de las acciones y los bonos mundiales.

Los inversores esperan que la ralentización de la inflación permita a la Reserva Federal frenar sus agresivas subidas de los tipos de interés, que han castigado a los mercados de renta variable y de renta fija este año.