La escasez de semiconductores y el retraso en el empaquetado y las pruebas de los chips harán que la producción mundial de vehículos ligeros se reduzca en cinco millones este año, dijo el jueves la empresa de datos IHS Markit, lo que supone el mayor recorte de sus perspectivas en nueve meses.

Citando los problemas de la cadena de suministro, IHS dijo que recortaba su previsión de producción de vehículos ligeros en un 6,2% para 2021 y en un 9,3% para 2022, situándose en 75,8 millones de unidades y 82,6 millones de unidades, respectivamente.

Las operaciones de embalaje y pruebas dentro del sector de los semiconductores en Malasia se vieron afectadas debido a las medidas de cierre del gobierno a principios de junio, dijo IHS, lo que agravó las dificultades en una cadena de suministro ya limitada.

"Nuestra interpretación de la situación en Malasia, que es responsable del 13% del suministro mundial de semiconductores para la industria del automóvil, se ha vuelto más pesimista", dijo IHS.

"El retraso de dos meses y medio que se ha acumulado desde junio tardará en despejarse y se prevé que se prolongue hasta bien entrado el año 2022".

Los fabricantes de automóviles, desde General Motors hasta la japonesa Toyota, han recortado sus previsiones de producción y ventas debido a la escasez de suministros de chips, agravada por el resurgimiento del COVID-19 en los principales centros de producción de semiconductores de Asia.

Según IHS, los problemas de los semiconductores han provocado una pérdida de producción de 1,44 millones de unidades en el primer trimestre y de otros 2,6 millones en el segundo.

Actualmente, las pérdidas del trimestre se sitúan en 3,1 millones de unidades y en aumento, casi el doble de su previsión anterior.

"Las perspectivas para el cuarto trimestre reflejan ahora un mayor riesgo, ya que los retos de la cadena de suministro -principalmente de semiconductores- se mantienen". (Información de Rithika Krishna y Sanjana Shivdas en Bengaluru; edición de Krishna Chandra Eluri)