Los senadores estadounidenses Richard Blumenthal y Edward Markey presentaron la "Declaración de derechos de los pasajeros y la Ley que prohíbe a las aerolíneas imponer tasas ridículas" para ampliar las protecciones de los viajeros aéreos.

El proyecto de ley obligaría a las aerolíneas a pagar al menos 1.350 dólares a los pasajeros a los que se deniegue el embarque como consecuencia de un vuelo sobrevendido, proporcionaría el reembolso del billete y transporte alternativo en caso de retraso del vuelo y prohibiría a las aerolíneas seguir reduciendo el tamaño de los asientos de los aviones a la espera de nuevas regulaciones.