Bloque 1: Noticias esenciales

  • Hong Kong se abre a las criptomonedas.
A partir del 1 de junio, los inversores minoristas de Hong Kong podrán comprar oficialmente criptomonedas en plataformas reguladas, en virtud de la nueva normativa de la Securities and Futures Commission (SFC). El regulador ha elaborado estas normas en colaboración con 152 entidades, con el objetivo de proteger a los inversores a través de diversas medidas. Las plataformas que deseen obtener la licencia necesaria tendrán que cumplir ciertas normas, sobre todo en materia de segregación de fondos y ciberseguridad. El problema es que, de momento, ninguna plataforma ha obtenido esta licencia.
  • Dos candidatos a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2023 aceptan donaciones en bitcoin
Dos candidatos a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, Robert Francis Kennedy Jr. (demócrata) y Vivek Ramaswamy (republicano), han anunciado que aceptarán donaciones en bitcoin para financiar sus campañas. Kennedy Jr, sobrino del ex presidente John F. Kennedy, es el primer candidato que lo hace. Ambos destacaron la importancia de la libertad monetaria que ofrece Bitcoin.
  • Ledger responde a las preocupaciones de la comunidad sobre "Ledger Recover
Ante las críticas sobre su función "Ledger Recover", que extrae la frase semilla (la clave privada - contraseña del monedero) de los usuarios, Ledger ha decidido hacer que el código de esta función sea de código abierto para una mayor transparencia. El CEO de Ledger, Pascal Gauthier, afirmó que la misión de la empresa es hacer que las criptomonedas sean más fáciles y seguras. Pascal Gauthier también reveló que los datos encriptados podrían entregarse a los gobiernos que lo soliciten en casos graves como terrorismo o drogas.

  • Binance lucha contra la ciberdelincuencia norcoreana
Binance ha congelado e incautado 4,4 millones de dólares en criptodivisas vinculadas a Corea del Norte, lo que subraya la importancia de la transparencia de blockchain para la aplicación de la ley. Esta acción se ha llevado a cabo en colaboración con las autoridades estadounidenses para combatir la ciberdelincuencia norcoreana. El consejero delegado de Binance, Changpeng Zhao, ha subrayado que ha sido la propia bolsa la que ha llevado a cabo estos bloqueos.

Bloque 2: Criptoanálisis de la semana

En 2018, el multimillonario Peter Thiel definió la relación de las criptomonedas y la inteligencia artificial (IA) calificando las "criptomonedas de libertarias y la IA de comunista".

Esta sorprendente dicotomía se ha visto recientemente agudizada por la popularidad exponencial de la inteligencia artificial entre el gran público desde finales del año pasado. Pero ahora, para algunos desarrolladores, estas dos fuerzas podrían converger para crear una sinergia tecnológica sin precedentes.

El argumento clave es que los conocimientos y métodos desarrollados en los ámbitos de la seguridad y la criptografía de la cadena de bloques podrían allanar el camino para nuevas aplicaciones de la IA. Y lo que es más importante, estos enfoques podrían tener el potencial de mitigar algunos de los riesgos inminentes asociados al crecimiento incontrolado de la IA. Pero la pregunta sigue siendo: ¿nos dirigimos hacia un futuro precario impulsado por la IA?.

Eliezer Yudkowsky, una figura destacada de la seguridad de la IA, analizó la respuesta en un reciente episodio de Bankless Podcast, un programa centrado principalmente en el sector Web3. En su opinión, la confluencia de las disciplinas de la IA y la criptografía era interesante por dos razones.

En primer lugar, Yudkowsky sostiene que estamos a punto de desarrollar una inteligencia artificial general (IAG), capaz de realizar cualquier tarea humana, potencialmente en nuestro detrimento. En segundo lugar, señala que los expertos en seguridad y criptografía pueden desempeñar un papel a la hora de alinear la trayectoria de la IA, lo que podría "preservar el futuro de la humanidad."

Hay que decir que el espectacular desarrollo de la IA puede superarnos rápidamente si no nos mantenemos al día sobre el tema. Entre los últimos avances significativos en IA se encuentran las inversiones de Microsoft y Google (Alphabet) en entidades de investigación de IA como OpenAI y Anthropic, así como la fusión de DeepMind y Google Brain.

El auge de modelos de IA cada vez más sofisticados, como GPT-4 y AutoGPT, presagia el advenimiento de la AGI. Más concretamente, el reciente trabajo de investigación "GPT4: Sparks of Artificial General Intelligence" mostraba cómo GPT-4 ya está demostrando los primeros ejemplos de teoría de la mente, una medida utilizada habitualmente para evaluar la inteligencia humana.

 
Mientras tanto, el atractivo de la IA parece haber repercutido en la escena empresarial, ya que el 90% de los fundadores de sitios web3 recurren a la IA, según Chris Frantz, fundador de la plataforma Loops.
Sin embargo, si esta tendencia es cierta, indica una simplificación excesiva y una visión aislada de las tecnologías interconectadas, como la IA, la blockchain, el metaverso, la identidad digital y la prueba criptográfica, entre otras. Estos elementos son parte integrante de nuestra economía digital en evolución, y funcionan al unísono y no de forma aislada.

A medida que avanzamos hacia un futuro dominado por la IA, se hace cada vez más evidente la necesidad de un enfoque descentralizado de la seguridad de la información. El reto al que nos enfrentamos colectivamente es cómo almacenar y compartir datos valiosos en un entorno descentralizado sin recurrir a intermediarios centralizados, algunos de los cuales pueden tener intenciones traicioneras utilizando la IA.

Sin embargo, la percepción de las criptomonedas y la tecnología blockchain como puramente relacionadas con el dinero ha llevado posiblemente a un pensamiento retrógrado. Este malentendido ha impedido el reconocimiento del potencial de la blockchain para una miríada de propósitos más allá de las transacciones financieras, desde resolver los problemas de compartir información valiosa en la era digital hasta mejorar la confianza y la transparencia en la gestión de datos.

Idealmente, el mensaje de Bitcoin debería haber abarcado el intercambio de datos y la privacidad, en línea con las principales preocupaciones de los cypherpunks a los que Satoshi Nakamoto desveló el libro blanco de Bitcoin en 2008. Sin embargo, parece que esta faceta del potencial de Bitcoin se ha perdido en la fascinación del público por sus implicaciones financieras.

Si se hubiera comprendido mejor el potencial de la tecnología, al sector le habría resultado más fácil hacer frente a los retos jurídicos y de privacidad inherentes. Tal vez habría habido menos estafas, menos interés por el beneficio monetario y una mayor voluntad de encontrar soluciones significativas a los problemas de la era digital.

Sin embargo, ante los crecientes retos de la IA, el potencial de la tecnología blockchain para ofrecer soluciones se hace casi inevitable. Los libros de contabilidad inmutables de blockchain, por ejemplo, permiten rastrear la procedencia de los contenidos, lo que puede proteger contra falsificaciones profundas.

En menor medida, las criptomonedas pueden servir como método universal de remuneración para los contribuyentes a la educación en IA, independientemente de las fronteras geográficas. Por ejemplo, las comunidades gobernadas por la blockchain, como Bittensor, incentivan a los desarrolladores de IA a crear modelos más fáciles de usar, respondiendo así a la preocupación de que los sistemas privados de IA prioricen los beneficios de los accionistas sobre los derechos de los usuarios.

A pesar de estas prometedoras aplicaciones, aún queda un largo, largo camino por recorrer antes de que estas ideas puedan abordar plenamente los retos que nos aguardan, especialmente en lo que se refiere a la escala necesaria para su implantación global. Estas soluciones no son panaceas, y el camino hacia el éxito requerirá probablemente la integración de muchas tecnologías: pruebas de conocimiento cero, cifrado homomórfico, computación segura, identidades digitales y credenciales descentralizadas, por citar sólo algunas.
 
Aunque nos enfrentamos a enormes retos en el ámbito de la IA -desde la protección de los derechos de autor en grandes modelos lingüísticos hasta el "dividendo del mentiroso" generado por nuestra incapacidad actual para distinguir los contenidos reales de los generados por la IA-, no existe una bala de plata que salve a la humanidad de las máquinas. 
 
Pero considerar que la Web3, la blockchain o la criptografía son obsoletas e irrelevantes para el futuro emergente de la IA es cometer un error radical sobre el problema que tenemos que resolver.

Bloque 3 : Tops & Flops