SAO PAULO, 24 nov (Reuters) - Los precios al consumidor de Brasil se aceleraron en el mes hasta mediados de noviembre, dijo el jueves la agencia gubernamental de estadísticas IBGE, marcando un segundo mes de vuelta en territorio positivo tras una breve racha deflacionaria impulsada por las medidas del gobierno para hacer frente a los crecientes costos.

El índice de precios al consumidor IPCA-15 registró un aumento del 0,53% en el mes hasta mediados de noviembre, por encima del 0,16% de octubre, pero todavía por debajo de las expectativas del 0,56% de los economistas encuestados por Reuters.

La inflación anual, en tanto, mantuvo su tendencia a la baja y se situó en el 6,17%, por debajo del 6,85% del mes hasta mediados de octubre y la más baja desde abril de 2021. Los economistas esperaban que la inflación a 12 meses fuera del 6,21%.

Las nuevas cifras se conocen luego de que el banco central de Brasil decidió en septiembre pausar su agresivo ajuste monetario, manteniendo las tasas de interés estables en 13,75% tras 12 alzas consecutivas que las elevaron desde un mínimo histórico del 2% en marzo de 2021.

No obstante, el jefe del banco central, Roberto Campos Neto, dijo a principios de este mes que el país no estaba fuera de peligro en cuanto a la inflación y que los responsables de la política económica pensaban que aún queda trabajo por hacer.

Los datos del IBGE del mes pasado ya mostraron que Brasil había interrumpido la racha deflacionaria de agosto y septiembre, impulsada por una fuerte caída del costo de los combustibles tras una serie de recortes fiscales.

Campos Neto señaló que un deterioro fiscal podría obligar a un nuevo giro de la política monetaria, en respuesta al importante aumento del gasto previsto por el presidente electo Luiz Inacio Lula da Silva, que asumirá el cargo el 1 de enero.

En el reporte de inflación hasta mediados de noviembre, el IBGE informó de que ocho de los nueve grupos encuestados registraron aumentos mensuales, siendo las comunicaciones la única excepción.

Los precios de los alimentos y las bebidas subieron un "expresivo" 0,54%, según el organismo de estadística, mientras que los del transporte y la salud y los cuidados personales aumentaron un 0,49% y un 0,91%, respectivamente. Los precios de los carburantes subieron por primera vez en cinco meses.

(Reporte de Gabriel Araujo; Editado en Español por Ricardo Figueroa)