Salt Mobile, que es propiedad del multimillonario francés Xavier Niel y opera en Suiza, cree que el acuerdo puede violar los términos de una empresa conjunta de banda ancha de 3.100 millones de dólares, llamada Swiss Open Fibre, que Salt y Sunrise habían anunciado en mayo.

El consejo de administración de Sunrise aprobó por unanimidad la adquisición de Liberty Global anunciada este mes y el accionista de Sunrise, Freenet de Alemania, ha ofrecido su participación del 24,4%, pasos que, según Salt, "ya han destruido un valor significativo para Salt y sus accionistas".

"A Salt le preocupa que la transacción propuesta... infrinja los derechos contractuales establecidos como parte de su empresa conjunta Swiss Open Fibre con Sunrise", dijo Salt en un comunicado.

Sunrise replicó que no ha violado ninguna obligación contractual con Salt y que nada en la unión Salt-Sunrise de mayo impedía una oferta pública de adquisición como la de Liberty.

"Este escenario de una oferta pública de adquisición no solicitada estaba explícitamente previsto en el acuerdo entre Sunrise y Salt", dijo Sunrise en un comunicado.

"Sunrise no ha solicitado ni alentado en ningún momento la oferta de Liberty", dijo Sunrise.

"De hecho, Sunrise rechazó las primeras propuestas de Liberty... Sólo una vez que la oferta actual fue propuesta por Liberty, el consejo de administración de Sunrise determinó que era lo mejor para la compañía".

Todavía no se ha presentado ninguna demanda, añadió Sunrise.

Quinn Emanuel Urquhart & Sullivan, LLP está representando a Salt y ha presentado documentos en un tribunal de Estados Unidos para poder reunir pruebas para utilizarlas en un caso no estadounidense.

El Financial Times informó por primera vez de la amenaza de demanda de Salt.