Royal Dutch Shell afirmó el jueves que el aumento de los precios del gas natural y la electricidad en todo el mundo tendrá un impacto significativo en sus ingresos en el tercer trimestre.

En una actualización previa a los resultados trimestrales de este mes, Shell también dijo que los daños causados por el huracán Ida de agosto mermarán los beneficios en 400 millones de dólares en el trimestre.

Los precios del gas natural y la electricidad en todo el mundo han subido debido a que la escasez de suministros de gas ha chocado con la fuerte demanda en las economías que se recuperan de la pandemia del COVID-19.

Shell es el principal vendedor mundial de gas natural licuado (GNL), que representa alrededor del 20% de la demanda mundial, aunque sus ventas han disminuido en los últimos meses por problemas de producción.

Se espera que la licuefacción en el trimestre sea de entre 7 y 7,5 millones de toneladas, el nivel más bajo desde 2016, "reflejando las limitaciones de gas de alimentación y el mantenimiento adicional", dijo Shell.

La compañía dijo que el flujo de caja en su división de GNL "se espera que se vea significativamente afectado por las grandes entradas de margen de variación en la parte posterior del entorno de precios de gas y electricidad prevaleciente".

La producción de petróleo y gas de Shell descendió en el trimestre hasta situarse entre 2,025 y 2,1 millones de barriles equivalentes de petróleo al día (boed) debido a una prolongada interrupción de unos 90.000 boed en algunos de sus yacimientos marinos del Golfo de México tras el paso del huracán Ida. (Reportaje de Ron Bousso. Edición de Jason Neely y David Goodman)