MADRID, 2 ago (Reuters) -El fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa rebajó el martes aún más sus expectativas de rentabilidad para 2022 y dijo que seguiría en negativo hasta 2023, alegando el encarecimiento de las materias primas, fallos en componentes e incertidumbre geopolítica.

La fabricación de mástiles y palas para turbinas eólicas ha resultado ser un negocio difícil en los últimos años, a pesar de la fuerte demanda de los Gobiernos que apuestan por la energía eólica para desprenderse de los combustibles fósiles. Los retos han sido la competencia, la interrupción por el COVID-19 y los precios galopantes de los metales, agravados por la guerra en Ucrania.

Siemens Gamesa ha tenido problemas en particular, en parte con la entrega de nuevos productos. Esto llevó a su accionista mayoritario, Siemens Energy, a lanzar una oferta de 4.050 millones de euros (4.200 millones de dólares) para comprar el tercio de la participación que aún no posee.

El fabricante de turbinas ha puesto en marcha "acciones de optimización de la plantilla y de la huella", dijo el martes, pero no dio detalles más allá de decir que se llevaría a cabo a nivel mundial.

Fuentes conocedoras del proceso dijeron a Reuters que la empresa está considerando recortar unos 2.500 puestos de trabajo, o alrededor del 9% de su plantilla.

La compañía dijo que ahora espera que su margen EBIT para todo el año, excluyendo ciertos costes, sea de -5,5%, desde una previsión anterior del -4%, incluso teniendo en cuenta el impacto de las plusvalías de la venta de su división de desarrollo de parques eólicos.

Las averías y reparaciones de componentes, sobre todo en su negocio del mercado nacional, costarían 113 millones de euros, alrededor del 4,6% de los ingresos, en el tercer trimestre.

(Información de Isla Binnie; editado en español por Flora Gómez y Benjamín Mejías Valencia)