SAINT-ESCOBILLE, Francia, 15 ago (Reuters) - Las plantas de maíz cerca de París han quedado atrofiadas y el suelo de los campos de trigo cosechados está muy seco, pero en la parcela de sorgo de Eudes Coutté las hojas están verdes y las plantas tienen una espiga llena de granos.

Hace cuatro años, Coutté y su hermano empezaron a cultivar sorgo, un cereal poco conocido en Europa pero muy utilizado en otras partes del mundo y que puede ser un ingrediente para la repostería sin gluten, el cuscús o incluso la cerveza.

Para Coutté, las ventajas del sorgo son que en gran parte de Francia no necesita ser regado, no requiere pesticidas y sólo necesita un tercio del fertilizante que requiere el trigo.

"El sorgo permite un nuevo tipo de agricultura, más sostenible, ya que preserva los recursos", dice Coutté, de 40 años, de pie en un campo de sorgo que le llega a la cintura en Saint-Escobille, a 75 km al sur de la capital francesa. "Debemos pensar en la agricultura del mañana y en cómo podemos producir alimentos sin un uso masivo de agua".

Con el calor extremo de 2022, incluso los rendimientos del sorgo se verán afectados, y espera que este año los rendimientos caigan a tres-cuatro toneladas por hectárea, frente a las cinco-seis toneladas de un año normal.

Sin embargo, el hecho de que este rendimiento no requiera riego al norte del río Loira es una "ventaja competitiva", dijo, en un momento en que la sequía se deja sentir en toda Francia, con restricciones en el acceso al agua.

Con un mayor número de agricultores como los hermanos Coutté que se decantan por este cultivo, la producción francesa de sorgo creció a casi 400.000 toneladas en 2021 desde las 244.000 de 2016, según datos del Ministerio de Agricultura.

De las casi 800.000 toneladas métricas de sorgo producidas en Europa en 2021-22, solo una cuarta parte se destinará al consumo humano, el resto se destinará principalmente a la alimentación animal, según datos de la UE.

El analista de cultivos de Stratégie Grains, Vincent Braak, dijo que el sorgo ha ganado terreno en Europa en los últimos años, pero todavía tiene dificultades para su comercialización, ya que el mercado no está tan desarrollado como el del maíz y otros cereales.

"Pero como los veranos son cada vez más calurosos, podemos esperar que más agricultores empiecen a cultivar sorgo para sustituir parte de su maíz", dijo.

Los Coutté se esfuerzan por encontrar nuevos mercados para su cosecha. En los próximos años, los hermanos planean trabajar con socios locales para desarrollar cerveza de sorgo, filete vegetariano de sorgo y otros productos.

(Reporte de Sarah Meyssonnier; Edición de Susan Fenton; información adicional de Gus Trompiz; escrito por Geert De Clercq; edición de Ingrid Melander y Susan Fenton; traducción de Flora Gómez)