Energía: Los precios del petróleo vuelven a la baja, tras caer por cuarta semana consecutiva. El ambiente en los mercados petroleros ha cambiado rápidamente, y los operadores esperan que el mercado esté menos tenso de lo previsto. El aumento de los inventarios semanales en Estados Unidos confirmó esta tendencia, con un incremento de las existencias de 3,6 millones de barriles (frente a un consenso de 2,5 millones). Sin embargo, esta debilidad de los precios podría incitar a la OPEP, y a Arabia Saudí en particular, a limitar aún más su producción. Más concretamente, Riad podría ampliar sus cuotas de producción (en torno a 1 millón de barriles diarios) el año que viene, de nuevo con el objetivo de sostener los precios del crudo. Por último, cabe recordar que el cártel del petróleo se reunirá en Viena el 26 de noviembre. En cuanto a los precios, el Brent cotiza en torno a 78,30 dólares, mientras que el WTI ronda los 74 dólares.
Metales: Mientras que los precios del petróleo siguen bajo presión, no ocurre lo mismo con los metales industriales, que en general se mantienen bien situados en Londres, con la excepción del níquel, que sigue bajando hasta los 9.900 USD. El cobre subió a 8.165 USD, al igual que el zinc (2.570 USD) y el plomo (2.270 USD). Las últimas estadísticas chinas han contribuido al buen comportamiento de los precios. La producción industrial aumentó un 4,6% interanual en octubre, ligeramente por encima de la previsión de consenso del 4,5%. En cuanto al oro, la caída de los rendimientos de los bonos alegra claramente a los tenedores de oro. Por enésima vez, el metal dorado se acerca a la barrera de los 2.000 dólares la onza.
Productos agrícolas: Los precios de los cereales no fluctuaron mucho la semana pasada en Chicago. El precio del maíz se estabilizó en torno a los 490 céntimos el bushel, frente a los 580 céntimos del trigo.