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Lo esencial:
- La renta variable europea va en contra de la tendencia.
- Los valores defensivos tienen el viento a favor en Estados Unidos.
- Los productos agrícolas vuelven a subir.
- El yen sigue bajando, pero la renta variable japonesa retrocede.
Los mercados de valores cayeron en general la semana pasada en todo el mundo, con la excepción de Europa, donde la subida del viernes permitió al MSCI Europe cerrar al alza. Japón pagó el precio más alto, borrando algunas de las ganancias que se habían acumulado gracias al debilitamiento del yen.
El sector de consumo discrecional y el de tecnología bajaron a principios de año, repuntaron en marzo y han estado a la baja desde principios de abril. Estos fueron los dos sectores más atacados la semana pasada, junto con el industrial. La sanidad y el consumo básico, dos sectores más defensivos, dominan el debate. La energía se está recuperando.
Para ilustrar la fortaleza de los valores defensivos, echemos un vistazo al S&P500 estadounidense durante la semana pasada, dominado por dos minoristas: Target y Dollar General, y valores sanitarios: AbbVie y Pfizer.
Los índices de las cinco principales clases de materias primas se encuentran en una pendiente descendente desde principios de abril, tras sus frenéticas carreras de principios de año. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los precios agrícolas siguen subiendo. Esto se debe, por supuesto, a la guerra en Ucrania, pero también a otros factores como el aumento de los costes de explotación, en particular por la subida del precio del combustible.
Información interesante extraída del Informe de "Bear Trap Report", una recopilación de debates entre profesionales financieros. "Los gobiernos y las empresas... están tratando de convertir todo, desde la madera hasta el estiércol de vaca, en combustibles... Todo tipo de tecnologías están sobre la mesa para ayudar a responder a la pregunta: ¿queremos renunciar a la mitad de nuestros alimentos para poner gasolina en nuestro coche?"
En el mercado de divisas, el dólar sigue subiendo frente al yen, aunque es evidente que esto ya no beneficia a los mercados de valores japoneses. En un discurso, un funcionario del Banco de Japón se mostró especialmente complaciente con la política monetaria, mencionando incluso una posible flexibilización. Esto refuerza la divergencia de estrategia entre el Banco de Japón y la Reserva Federal. Por su parte, el euro sufrió una nueva caída frente al dólar.
