La empresa de tecnología energética Baker Hughes construirá una nueva planta de lodos líquidos y una base independiente de montaje, mantenimiento y reparación en la bahía namibia de Walvis para atender el auge de las actividades de exploración en alta mar, según ha declarado un alto ejecutivo.

El proyecto ayudará a Namibia a hacer frente a una afluencia de plataformas de perforación y buques de apoyo que amenaza con saturar sus dos únicos puertos comerciales, Walvis Bay y el más pequeño Luderitz, ya que luchan contra la congestión y las instalaciones inadecuadas.

"Serán fluidos de perforación fabricados en Namibia para pozos namibios, un paso importante en la construcción de su industria del petróleo y el gas", declaró a Reuters Tokunbo Azeez, director ejecutivo de Baker Hughes para el África subsahariana, sobre la primera planta de lodos del país, que se espera que abra en septiembre.

Las plantas de lodos líquidos (LMP) son un engranaje vital en los trabajos de exploración en alta mar, ya que producen, almacenan y suministran "lodos" y salmueras a base de petróleo sintético que se utilizan durante la perforación para ayudar a evitar los peligrosos reventones y rozamientos.

Namibia, que aún no ha producido petróleo ni gas, se ha convertido en un punto caliente de exploración tras los descubrimientos en alta mar de TotalEnergies, Shell y, más recientemente, Galp Energia.

Las compañías petroleras importan fluidos de perforación de Angola y pueden esperar semanas a que se los entreguen, lo que infla los costes y el riesgo en sus operaciones, dijo Azeez.

En Luderitz, que el gobierno ha destinado a ser un centro energético, la autoridad portuaria nacional, Namport, está buscando cofinanciación de deuda por valor de 1.200 millones de dólares angoleños (64,5 millones de dólares) para ampliar su muro de muelle en al menos 300 metros para dar cabida a más buques de apoyo a plataformas. El coste total se estima entre 2.000 y 2.500 millones de dólares neozelandeses.

Las operaciones en alta mar de TotalEnergies se apoyan desde el puerto de Luderitz, mientras que Shell y Galp se apuntalan desde Walvis Bay, ya que nuevos actores, entre ellos Chevron, van a iniciar la exploración en breve, dijo el director general de Namport, Andrew Kanime.

"Si lo ampliamos, (el muro del muelle) nos permitirá entonces quizá duplicar o incluso triplicar la disponibilidad de atracaderos", declaró a Reuters.

La capacidad de atraque en este puerto físicamente limitado, donde las cargas pesqueras y mineras se disputan el espacio, es del 95%.

Es probable que la construcción prevista se retrase hasta principios del próximo año, ya que Namport espera la autorización medioambiental y arqueológica necesaria, añadió Kanime.