EINBECK (dpa-AFX) - KWS Sa at ha entrado en números rojos en la primera mitad del ejercicio 2023/24. El productor de semillas ha tenido que luchar enormemente contra los efectos negativos de las divisas. El productor de semillas tuvo que luchar enormemente con los efectos negativos de las divisas. Además, se debilitó el segmento del maíz, para el que es probable que se nublen las perspectivas futuras. De momento, esto no es motivo para que el Comité Ejecutivo modifique las previsiones anuales para el Grupo en su conjunto. Esto se debe a que el primer semestre del año suele ser bastante malo para la empresa por motivos estacionales. Además, se espera que el negocio de la remolacha azucarera crezca más de lo previsto. No obstante, el mercado bursátil respondió a la noticia con una clara rebaja.

Como uno de los valores más débiles del SDax, el precio de la acción cayó alrededor de un 5,6% hasta los 48,70 euros por la mañana, su nivel más bajo en casi cuatro años. En aquel momento, en mayo de 2020, la acción había iniciado un prolongado ascenso que la llevó a un máximo histórico de 80,90 euros un año después. Desde entonces, la acción ha perdido casi el 40% de su valor.

El analista Charley Bentley, de la casa de inversión Jefferies, ya había previsto una reacción negativa de la cotización en vista de la reciente debilidad de los resultados empresariales. Sin embargo, el experto del sector también señaló la escasa importancia del primer semestre del ejercicio: el Grupo obtiene sus resultados decisivos en el tercer trimestre.

Los principales mercados de KWS Saat se encuentran en el hemisferio norte. Allí, las fuentes de ventas más importantes -las semillas de maíz y remolacha azucarera- se siembran en los meses de febrero a mayo. Así, los seis primeros meses, que en el Grupo van de julio a diciembre, suponen como máximo un buen tercio de las ventas netas totales del ejercicio.

Esta vez, sin embargo, KWS Saat también tuvo que hacer frente a problemas monetarios. Sobre todo, la devaluación del peso argentino ha tenido un impacto negativo. El país sudamericano sufre una hiperinflación. Los costes del Grupo también aumentaron.

En el negocio del maíz, la retirada prevista de la venta de semillas de soja en Brasil tuvo un impacto negativo, y el negocio en EE.UU. también disminuyó. Esta débil evolución no pudo compensarse con un crecimiento significativo en los segmentos de cereales y remolacha azucarera.

En los seis meses transcurridos hasta finales de diciembre, las ventas del Grupo cayeron un 8% interanual, hasta situarse ligeramente por debajo de los 519 millones de euros. Las pérdidas antes de intereses e impuestos (EBIT) crecieron más de un tercio, hasta superar los 96 millones de euros. En la cuenta de resultados, la pérdida se amplió aún más hasta algo menos de 109 millones de euros.

Para el conjunto del año, el Consejo de Dirección sigue apuntando a un aumento de las ventas del tres al cinco por ciento sobre una base comparable, tras 1.800 millones de euros. Sin embargo, aquí se han tenido en cuenta los efectos de las divisas y los cambios en la cartera. El margen de explotación (margen EBIT), que siguió siendo negativo en el primer semestre, se espera que se sitúe entre el 11% y el 13% para el conjunto del año.

Sin embargo, el Comité Ejecutivo ha ajustado sus objetivos para los segmentos del Grupo: La dirección confía menos que antes en los segmentos del maíz y las hortalizas, y espera ahora un ligero descenso de las ventas anuales en cada uno de ellos.

En cambio, en el segmento de la remolacha azucarera se espera un aumento significativo de los ingresos. Anteriormente, el Comité Ejecutivo sólo esperaba un ligero aumento. En la primera mitad del año, este segmento se benefició del hecho de que los agricultores de varios países europeos pidieron sus semillas antes de lo habitual.