Japón ha acordado colaborar con Estados Unidos para ayudar a reducir el coste de los proyectos de energía eólica marina flotante, según informó la Casa Blanca en un comunicado emitido durante la visita del primer ministro Fumio Kishida a Washington para reunirse con el presidente Joe Biden.

En virtud del acuerdo, Japón y EE.UU. trabajarían para acelerar los desarrollos en ingeniería, fabricación y otras áreas relacionadas con los parques eólicos flotantes, según el comunicado. Tokio también aportaría 120.000 millones de yenes (784 millones de dólares) para desarrollar la tecnología eólica flotante a través de su Fondo de Innovación Verde.

Estados Unidos se ha fijado el objetivo de instalar 15 gigavatios de capacidad eólica marina flotante para 2035 -suficiente para abastecer a más de 5 millones de hogares- para ayudar a desplazar a los combustibles fósiles en la generación de energía y luchar contra el cambio climático.

El plan estadounidense también prevé reducir el coste de las instalaciones eólicas marinas flotantes que operan en aguas profundas en más de un 70%, hasta los 45 dólares por megavatio-hora, durante la próxima década. Las instalaciones eólicas flotantes suelen ser más grandes y costosas que las estructuras fijadas en el fondo.

La eólica marina flotante es relativamente nueva en Japón, donde las subastas estatales de parques eólicos marinos sólo han contado hasta ahora con instalaciones fijadas en el fondo.

El mes pasado, empresas energéticas japonesas como la unidad de energía eólica de Mitsubishi Corp, Tokyo Gas y JERA se asociaron para desarrollar conjuntamente una tecnología de energía eólica marina flotante que ayude a Japón a alcanzar sus objetivos en materia de energías renovables.

(1 $ = 153,1000 yenes) (Reportaje de Katya Golubkova; Edición de Tom Hogue)