El anuncio de Woodside Energy Group Ltd. (ASX:WDS) anunció la semana pasada que había optado por no vender sus participaciones en los activos de petróleo y gas de Macedon y Pyrenees, en Australia Occidental, lo que dejó perplejos a algunos. En las últimas semanas se creía que The Carlyle Group Inc. (NasdaqGS:CG) estaba en la pole position para comprar los activos. Woodside afirma que Macedon sigue siendo una fuente crítica de gas para el mercado nacional de Australia Occidental y que seguía viendo un gran valor en ambos activos.

Se entiende que el precio pedido era de unos 700 millones de dólares y que Carlyle había resuelto la mayoría de los asuntos relacionados con los costes de saneamiento del negocio de los Pirineos. Una posibilidad es que simplemente no estaba ahí en precio. Otra explicación es que la decisión reflejaba el deseo del gobierno de que se produjera más gas en el mercado nacional, lo que exigiría que Woodside conservara Macedon.

Woodside ha emitido comunicados de prensa en los que defiende su contribución al mercado del gas del estado, afirmando que siempre ha apoyado y apoyará las necesidades del mercado de Australia Occidental. El año pasado contrató a Morgan Stanley para vender Macedon y Pyrenees, un yacimiento maduro de petróleo y gas con 24 pozos y unos costes de rehabilitación de unos 1.000 millones de dólares. El campeón energético australiano ha indicado que está interesado en oportunidades de adquisición en alta mar, como el Golfo de México.

Como se informó anteriormente, la idea ahora es que está rebajando la retórica en torno a las fusiones y adquisiciones después de que las recientes conversaciones de adquisición con Santos llegaran a su fin, y se centrará en las operaciones hasta que se presente la operación adecuada. Los observadores afirman que Woodside dispone de abundante flujo de caja libre procedente de sus activos para afrontar el periodo comprendido entre 2025 y 2028, antes de tener que evaluar nuevas oportunidades.