ESSEN (dpa-AFX) - El consejero delegado de Thyssenkrupp, Miguel López, ha subrayado la urgencia de la anunciada reducción de capacidad en la división siderúrgica y de la proyectada asociación energética con EPCG. "A pesar de una larga tradición y un alto nivel de experiencia técnica, el futuro de nuestra industria siderúrgica está hoy en peligro", declaró López a los periodistas el miércoles. La demanda es demasiado baja, los costes, sobre todo energéticos, son demasiado elevados y el exceso de capacidad presiona sobre los precios. Además, hay importaciones baratas de Asia. "Por eso algo tiene que cambiar". Por eso en las últimas semanas se han dado pasos importantes para adecuar el sector siderúrgico al futuro.

"Queremos un acero que gane dinero de forma sostenible, tanto dinero que podamos lograr la transformación al acero verde", dijo López. Esto también se está haciendo en el caso de Alemania como lugar de negocios para garantizar el suministro de acero de alta calidad a la industria nacional. Por tanto, la demanda gubernamental de la planta de reducción directa es una inversión importante en la transformación verde de Alemania".

Thyssenkrupp planea una reducción significativa de la capacidad de producción de acero en Duisburgo, que irá acompañada de recortes de plantilla. Aún no se han dado a conocer los detalles. Además, el holding EPCG, propiedad del multimillonario checo Daniel Kretinsky, se hará con el 20% de la división siderúrgica, y más adelante con el 50%. Se tratará sobre todo del suministro de energía.

"Queremos que en el futuro se siga produciendo acero de alta calidad en Duisburgo", subrayó López, "un acero que Alemania necesita y para el que nuestro país no debe depender completamente de otros países sólo por razones de resistencia. Al fin y al cabo, gran parte de la prosperidad de nuestro país se basa en el acero".

La división siderúrgica de Thyssenkrupp es el mayor fabricante de acero de Alemania y emplea a unas 27.000 personas. De ellas, unas 13.000 trabajan en Duisburgo. Casi todos los centros de Thyssenkrupp Steel Europe están situados en Renania del Norte-Westfalia.

López subrayó que los planes de reestructuración se discutirán "naturalmente" con el Comité de Empresa y el Consejo de Supervisión de Steel Europe, incluido el impacto sobre el empleo. En el pasado, los representantes de los trabajadores habían acusado al Consejo de Administración de Thyssenkrupp, y a López en particular, de no mantenerles suficientemente informados ni hacerles partícipes de las decisiones importantes.