El oro al contado subió un 1% hasta los 2.307,88 dólares por onza a las 10:06 a.m. ET (1406 GMT), tras haber tocado su nivel más bajo desde el 5 de abril a principios de la sesión.
Los futuros del oro estadounidense subieron un 0,7% hasta los 2.318,50 dólares.
El dólar cedió un 0,2% tras alcanzar máximos de casi seis meses, lo que abarató el oro para los tenedores de otras divisas, mientras que los rendimientos de los bonos estadounidenses de referencia a 10 años también bajaron.
"Hay un poco más de incertidumbre sobre la economía mundial y junto con las tensiones geopolíticas y la incertidumbre sobre las elecciones políticas, hay muchas cosas que están trabajando a favor del oro", dijo Chris Gaffney, presidente de mercados mundiales de EverBank.
El oro alcanzó un máximo histórico de 2.431,29 dólares el 12 de abril, debido a las fuertes compras de los bancos centrales y a la demanda de los inversores minoristas chinos.
Sin embargo, los precios han caído más de un 5% desde entonces en medio del enfriamiento de las tensiones en Oriente Próximo y el desvanecimiento de las expectativas de recortes anticipados de los tipos de interés en Estados Unidos este año.
"Unos tipos más altos durante más tiempo, lo que normalmente sería negativo para el oro, pero los inversores son capaces de dejar eso en un segundo plano y se están fijando en cosas que en realidad son más favorables para el oro en estos momentos", añadió Gaffney.
La decisión política del banco central estadounidense se conocerá a las 1800 GMT, seguida de las declaraciones del presidente Jerome Powell. Se espera que la Fed mantenga estable su tipo de interés de referencia entre el 5,25% y el 5,5%.
Los datos mostraron que las nóminas privadas estadounidenses aumentaron
más de lo esperado
en abril, lo que sugiere que el mercado laboral mantuvo su impulso a principios del segundo trimestre.
Los operadores han recortado recientemente las apuestas de recortes de tipos de la Reserva Federal este año debido a unos datos económicos estadounidenses mejores de lo esperado y a una inflación pegajosa.
La plata al contado subió un 1% a 26,54 $ la onza y el platino subió un 2,6% a 957,70 $. El paladio se mantuvo estable en 947,75 $.
