El lanzamiento de estos ETF en Hong Kong era muy esperado por la comunidad de criptomonedas, ya que Asia cuenta con una base de tenedores de criptomonedas mucho mayor que cualquier otra región del mundo.
Número de tenedores de criptomonedas en todo el mundo
Statista, Huobi Research
La falta de interés por los ETF en Hong Kong obedece a varias razones. En primer lugar, los mercados de capitales estadounidenses siguen siendo el terreno de juego dominante para las instituciones de todo el mundo.
El 11 de enero, cuando BlackRock y compañía lanzaron su ETF de Bitcoin Spot, muchas instituciones financieras, incluidas asiáticas, se pasaron a estos productos estadounidenses, lo que redujo el atractivo de los de Hong Kong casi dos meses después. Es difícil imaginar un mundo en el que los ETF de Hong Kong lleguen a ser más importantes que los fondos cotizados en Estados Unidos.
Además, los criptoinversores asiáticos, al igual que en Occidente, invierten principalmente de forma directa en activos nativos a través de plataformas de criptodivisas, lo que reduce el atractivo de estos fondos para los inversores minoristas.
También hay que tener en cuenta que las criptodivisas siguen estando prohibidas en China continental. A menos que se invierta esta situación legal, casi 1.400 millones de personas en Asia no podrán destinar capital a estos fondos. Permitir que China continental negocie estos ETF de criptomonedas iría en contra de la política monetaria de Pekín de controlar la subida y bajada del yuan (RMB).
Los controles de capital en China están diseñados para regular la entrada y salida de dinero, evitar las fluctuaciones monetarias excesivas y la fuga de capitales, y mantener la estabilidad y el valor del yuan. No obstante, estos controles de capital siguen siendo un elemento central de su política económica, ya que sus exportaciones pueden seguir teniendo precios competitivos en los mercados mundiales.
Y permitir a un comerciante comprar acciones de un ETF de criptomonedas en yuanes a través de una cuenta de corretaje local, y luego venderlas contra criptomonedas, crearía una forma muy eficaz de eludir los controles de capital. Así que hay pocas probabilidades de que Pekín cambie su discurso sobre la promoción de la criptoesfera.
Ahora habrá que esperar a ver cómo evolucionan los ETF en Hong Kong en los próximos 12 a 18 meses, pero por el momento, el bombo no está ahí.