La Bolsa de Metales de Londres (LME) lanzó el miércoles una consulta en la que exige a los productores de marcas de aluminio entregables con cargo a sus contratos que presenten datos sobre emisiones de carbono para marzo de 2025.

La propuesta pretende alinear el mercado del aluminio con el requisito del Mecanismo Europeo de Ajuste de las Emisiones de Carbono (CBAM), que aplica un coste relacionado con el carbono a determinadas

productos importados.

Los productores de aluminio primario, aleación de aluminio, Contrato de Aleación Especial de Aluminio de América del Norte ("NASAAC")) aprobados por la LME tendrán que presentar a la bolsa los datos de emisiones tanto de Alcance 1 como de Alcance 2.

Las emisiones directas procedentes de la producción de aluminio, incluidos los combustibles utilizados en los hornos de fusión, pertenecen al Alcance 1, mientras que las emisiones indirectas procedentes de la generación de electricidad utilizada para fabricar aluminio pertenecen al Alcance 2.

Los productores deberán proporcionar estos datos de emisiones "en el punto en el que se convierte en material de grado LME", según la propuesta.

Los productores de aluminio tendrán que hacer la primera entrada de datos de emisiones de 2024 antes del 15 de marzo de 2025, y deberán actualizarlos anualmente.

Las marcas que no presenten los datos de emisiones podrían ser excluidas de la lista.

La entrega de aluminio a los almacenes registrados en la LME también irá acompañada de un formulario de notificación de emisiones "CBAM".

No se exigirán informes retroactivos para el aluminio con información deficiente que ya se encuentre en los almacenes.

"La LME se ha puesto en contacto con sus propias marcas de aluminio primario que cotizan en la LME para conocer el alcance del trabajo que ya se está realizando en este espacio, y el 84% del aluminio primario de la LME

marcas ya publican informes de sostenibilidad que incluyen sus cálculos de emisiones", dijo la bolsa.

La LME también está considerando colaborar con su socio

Metalshub para listar un producto "LME globally deliverable low carbon aluminium (CBAM)" para hacer un seguimiento de la liquidez del aluminio que se sitúe por debajo de una huella de carbono específica.

La bolsa insistió en que no necesitaba una plataforma separada para negociar el aluminio bajo en carbono a partir de 2021.

Este metal ligero, muy utilizado en el transporte, los envases y la construcción, es el que más energía consume para su producción, ya que requiere grandes cantidades de electricidad.

En 2022, el sector del aluminio emitió 1.110 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, según el Instituto Internacional del Aluminio.