Un vistazo a la jornada en los mercados asiáticos.

Las ondas dovish de la conferencia de prensa del presidente de la Fed, Jerome Powell, el miércoles, siguen bañando los mercados mundiales, poniendo a las bolsas asiáticas en la cúspide de una segunda subida semanal consecutiva y de máximos no vistos en mucho más de un año. El sentimiento de los inversores es positivo y el apetito por el riesgo parece fuerte de cara a la apertura asiática del viernes, después de que las bolsas mundiales subieran y los rendimientos de los bonos estadounidenses y el dólar cayeran el día anterior. El ánimo optimista puede verse reforzado por los resultados del primer trimestre de Apple tras el cierre estadounidense del jueves, ya que la segunda empresa más valiosa del mundo registró un descenso de los ingresos menor de lo esperado y su consejero delegado, Tim Cook, afirmó que espera una vuelta al crecimiento de las ventas en el trimestre actual.

El calendario económico y empresarial regional es ligero el viernes: el PMI de servicios de Australia, la inflación al consumo de Tailandia y las ventas minoristas de Singapur son los datos más destacados.

Quizá la noticia más importante para los mercados mundiales el viernes, aparte de las cifras de empleo de EE.UU. de abril, proceda de Tiflis, donde el Banco Asiático de Desarrollo celebra su 57ª reunión anual. Está previsto que el ministro de Finanzas japonés, Shunichi Suzuki, y el gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, ofrezcan una rueda de prensa al margen de la reunión y, si se enfrentan a los periodistas, serán interrogados sobre la aparente intervención de Japón en el mercado de divisas esta semana comprando yenes.

Es probable que Japón interviniera a primera hora del lunes y a primera hora del jueves, hora local, comprando yenes para frenar su rápida caída, que culminó en un nuevo mínimo de 34 años de 160,00 por dólar. Las estimaciones sugieren que Tokio gastó algo menos de 60.000 millones de dólares en las dos incursiones de compra de yenes, aproximadamente la misma cantidad empleada en las tres intervenciones de septiembre y octubre de 2022, la última vez que las autoridades se sumergieron en el mercado. La acción selectiva, cuando la liquidez del mercado era especialmente escasa, parece haber funcionado, al menos por ahora: el yen alcanzó el jueves los 153,00 por dólar, su nivel más alto desde el 15 de abril y un 4,5% más alto que el mínimo histórico del lunes.

En la renta variable asiática, mientras tanto, las acciones de Hong Kong entran en la sesión del viernes en máximos de seis meses, tras haber saltado un 2,5% el jueves gracias a las ganancias de los valores tecnológicos, inmobiliarios y financieros locales. La promesa de Pekín esta semana de intensificar el apoyo económico ha contribuido a apuntalar el sentimiento.

El Hang Seng lleva ya ocho días seguidos de subidas, su mejor racha en cinco años y medio. Sin embargo, aún le queda camino por recorrer para superar esa racha: a finales de 2018 y principios de 2019, el índice subió 14 días seguidos, y sólo tuvo una jornada "bajista" en 22.

Los mercados de China continental permanecerán cerrados el viernes, último de un periodo festivo de tres días.

Estos son los acontecimientos clave que podrían proporcionar más dirección a los mercados el viernes:

- PMI de servicios de Australia (abril)

- Inflación al consumo en Tailandia (abril)

- Conferencia de prensa del ministro de Finanzas y del gobernador del banco central de Japón