CIUDAD DE MÉXICO, 19 abr (Reuters) - La economía de América Latina es resiliente y los indicadores de desempleo permanecen en niveles históricamente bajos, aunque resulta indispensable que los países apliquen reformas para impulsar las débiles estimaciones de expansión en el mediano plazo, dijo el viernes el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El organismo con sede en Washington revisó a la baja esta semana sus perspectivas de crecimiento del PIB para la región a un 2% para este año, desde el 2,3% del 2023, en medio de un adverso entorno macroeconómico global y ante los efectos de tasas de interés aún elevadas para controlar la inflación.

"La inflación disminuye y se proyecta que seguirá cayendo en 2024", dijo Rodrigo Valdés, director del Departamento para el Hemisferio Occidental del FMI, en los comentarios de apertura para una presentación del organismo en Washington.

"Los riesgos para la inflación se han vuelto, además, más balanceados, en general, aunque aún están inclinados al alza en muchos casos", añadió.

Las declaraciones de Valdés, exministro de Hacienda de Chile, se producen en el marco de las reuniones de primavera del FMI junto al Banco Mundial en las que se han enfatizado los riesgos para el crecimiento de Europa y China y la problemática fiscal para América Latina, que según el Fondo aún requiere más consolidación.

Entre los mensajes del FMI para la región, Valdés también hizo hincapié en la necesidad de llevar la deuda pública a niveles más equilibrados mediante el ajuste fiscal y la urgencia de impulsar la economía para elevar el potencial de expansión.

El FMI espera que las economías latinoamericanas crezcan un promedio del 2% en el mediano plazo, un nivel que está por debajo de sus pares en otras regiones.

"Será importante que los países identifiquen reformas con altos beneficios de crecimiento y trabajar duro en generar consenso con el fin de implementarlas de manera duradera e inclusiva", dijo Valdés.

(Reporte de Marion Giraldo en Ciudad de México; editado por Sofía Díaz Pineda)