Las empresas japonesas de servicios públicos están preocupadas por la escalada de tensiones en Oriente Próximo, ya que cualquier interrupción del suministro en la región tendrá un gran impacto en el abastecimiento y los precios del combustible, según afirmó el viernes un grupo industrial.

Kingo Hayashi, presidente de la federación japonesa de empresas eléctricas y presidente de Chubu Electric Power Co Inc, declaró a la prensa que si se interrumpe el transporte en el Estrecho de Ormuz, ello repercutiría significativamente en el volumen y el precio del aprovisionamiento de combustible. (Reportaje de Yuka Obayashi en Tokio; Edición de Jacqueline Wong)