Los resultados semestrales del antiguo fabricante cautivo de Sanofi muestran un modesto crecimiento del 2,6% en el primer semestre, con unos ingresos ligeramente inferiores a 500 millones de euros. El margen bruto descendió ligeramente hasta el 19,5%, al igual que el margen EBITDA, que bajó al 12,6%. El beneficio neto aumentó considerablemente hasta 62,8 millones de euros, pero la base de comparación está truncada. El flujo de caja libre fue negativo en 90,6 millones de euros en el semestre, debido a factores estacionales y a la variación de existencias. A primera vista, no hay nada de qué alegrarse.

Una OPV fallida

Una OPV fallida (Euroapi desde la OPV frente a STOXX Europe Santé y SBF120)

Sin malas noticias, buenas noticias

Sin embargo, al mercado le gustaron dos cosas. La confirmación de un margen Ebitda de entre el 12,5% y el 13,5% para el año, es decir, una versión ligeramente refinada del objetivo anterior (12% a 14%). Esta versión evita el accidente en la parte baja de la horquilla, pero elimina la posibilidad de alcanzar el 14%. Como el consenso era del 13,1%, estamos en el objetivo y no hay sorpresas desagradables. Naturalmente, se reiteran las previsiones a medio plazo. El segundo punto positivo es la confirmación del programa de creación de valor de 50 millones de euros anuales de aquí a 2026. Este objetivo se anunció el pasado mes de marzo para reforzar el plan inicial e intentar restaurar la reputación de la empresa tras varios reveses.

En vista de la subida del día, el mercado está pagando por ver, probablemente juzgando que hay una apuesta de valor que hacer tras la fuerte caída de la acción este año. Euroapi es el 4º valor con peores resultados en 2023 entre las capitalizaciones superiores a 1.000 millones de euros en la Bolsa de París, por detrás de Teleperformance, OVH y Altarea.