El miércoles, el yen estaba en torno a 157,55 por dólar cuando de repente se disparó, fortaleciéndose hasta 153 en la siguiente media hora.
El lunes, el Ministerio de Finanzas gastó la cifra sin precedentes de unos 6 billones de yenes interviniendo en el mercado para apuntalar el yen después de que cayera a 160,245 por dólar por primera vez desde abril de 1990, según mostraron los datos.
El Ministerio de Finanzas declinó en cada ocasión decir si estaba o no detrás de las subidas del yen, limitándose a repetir su disposición a intervenir en cualquier momento para frenar los movimientos desordenados.
Las operaciones con divisas tardan dos días hábiles en liquidarse, y los mercados japoneses están cerrados por festivos este viernes y el próximo lunes.
La proyección del banco central para las condiciones del mercado monetario del próximo martes indica una recepción neta de fondos de 4,36 billones de yenes, frente a una estimación de entre 700.000 y 1,1 billones de yenes de los intermediarios del mercado monetario que excluye la intervención.
(1$ = 155,1400 yenes)