Por Nidal al-Mughrabi, Steve Holland y Mohammad Salem

EL CAIRO/WASHINGTON/RÁFAH, FRANJA DE GAZA (Reuters) - Estados Unidos cree que las diferencias que siguen existiendo entre Israel y Hamás pueden salvarse en las negociaciones sobre la última propuesta de alto el fuego del grupo miliciano palestino, con motivo de la reanudación de las conversaciones en El Cairo el miércoles.

El martes, las fuerzas israelíes tomaron el principal paso fronterizo entre Gaza y Egipto en Ráfah, la ciudad del sur de Gaza donde más de un millón de palestinos desplazados han buscado refugio durante los siete meses de ofensiva israelí. La operación militar cortó una ruta vital para la ayuda al pequeño enclave, donde cientos de miles de personas carecen de hogar y pasan hambre.

En El Cairo, las cinco delegaciones que participaron el martes en las conversaciones sobre el alto el fuego --Hamás, Israel, Estados Unidos, Egipto y Qatar-- reaccionaron positivamente a la reanudación de las negociaciones, y se esperaba que las reuniones continuaran el miércoles por la mañana, dijeron dos fuentes egipcias.

El director de la CIA, Bill Burns, iba a viajar de El Cairo a Israel a última hora del miércoles para reunirse con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y con representantes israelíes, dijo una fuente familiarizada con el viaje.

Israel dijo el lunes que la propuesta en tres fases aprobada por Hamás era inaceptable porque se habían diluido los términos.

El portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, dijo que Hamás presentó una propuesta revisada y que el nuevo texto sugiere que las lagunas restantes pueden "cerrarse absolutamente". En las declaraciones el martes no quiso especificar cuáles eran.

Desde la única pausa en el conflicto hasta ahora --un alto el fuego de una semana en noviembre--, las dos partes han estado bloqueadas por la negativa de Hamás a liberar a más rehenes israelíes sin una promesa de un final permanente del conflicto y la insistencia de Israel en que solo abordaría una tregua temporal.

Imágenes del ejército israelí mostraron el martes tanques rodando por el complejo de pasos fronterizos de Ráfah, entre Gaza y Egipto, y la bandera israelí izada en el lado de Gaza. Israel afirma que Ráfah es el último bastión de los combatientes de Hamás.

Osama Hamdan, alto cargo de Hamás, advirtió el martes a la prensa en Beirut que si continuaba la agresión militar israelí en Ráfah, no habría acuerdo de tregua.

El ejército israelí dijo que estaba llevando a cabo una operación limitada en Ráfah para matar combatientes y desmantelar la infraestructura utilizada por Hamás, que dirige Gaza. Indicó a los civiles, muchos de los cuales habían sido desplazados de otras zonas de Gaza a principios del conflicto, que se dirigieran a una "zona humanitaria ampliada" situada a unos 20 kilómetros de distancia.

El secretario general de la ONU, António Guterres, hizo un llamamiento a Israel y Hamás para que no escatimen esfuerzos para acordar una tregua. "No se equivoquen: un ataque a gran escala contra Ráfah sería una catástrofe humana", dijo Guterres.

En Ginebra, el portavoz de la oficina humanitaria de la ONU, Jens Laerke, dijo que el "pánico y la desesperación" se estaban apoderando de la población de Ráfah.

INTENSOS BOMBARDEOS EN RÁFAH

Residentes de Ráfah informaron de intensos bombardeos de tanques el martes por la noche en algunas zonas del este de la ciudad. Un edificio municipal de Ráfah se incendió tras un bombardeo israelí, y un palestino murió y varios resultaron heridos, según los médicos. Un ataque israelí mató también a dos palestinos que viajaban en motocicleta.

Las autoridades sanitarias dijeron que Abu Yousef al-Najar, el principal hospital de Ráfah, cerró el martes después de que los intensos bombardeos en las inmediaciones obligaran a huir al personal médico y a unos 200 pacientes.

"Se han vuelto locos. Los tanques disparan proyectiles y las bombas de humo cubren el cielo", dijo Emad Joudat, de 55 años, residente en la ciudad de Gaza y desplazado en Ráfah.

La ONU y otras agencias internacionales de ayuda señalaron que el cierre de los dos pasos fronterizos con el sur de Gaza - Ráfah y Kerem Shalom, controlado por Israel - prácticamente ha aislado al enclave de la ayuda exterior y en el interior hay muy pocas tiendas disponibles.

Las familias se han hacinado en tiendas de campaña y refugios improvisados, sufriendo escasez de alimentos, agua, medicinas y otros artículos de primera necesidad.

Fuentes de la organización Media Luna Roja en Egipto dijeron que los envíos se habían detenido por completo. "Estos pasos son un salvavidas... Deben reabrirse sin demora", dijo Philippe Lazzarini, director de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).

La Casa Blanca dijo que le habían comunicado que el paso fronterizo de Kerem Shalom se reabriría el miércoles y que el suministro de combustible a través de Ráfah también se reanudaría entonces.

Según responsables de Hamás, un borrador de propuesta y un dirigente informado de las conversaciones, la propuesta que Hamás aprobó el lunes incluía una primera fase con un alto el fuego de seis semanas, una afluencia de ayuda a Gaza, la devolución de 33 rehenes israelíes, vivos o muertos, y la liberación por parte de Israel de 30 niños y mujeres palestinos detenidos por cada rehén israelí liberado.

Los detractores de la guerra de Gaza han instado al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a que presione a Israel para que cambie de rumbo. Estados Unidos, el aliado más cercano de Israel y su principal proveedor de armas, ha retrasado algunos envíos de armas a Israel durante dos semanas, según informaron cuatro fuentes el martes.

La Casa Blanca y el Pentágono declinaron hacer comentarios, pero se trataría del primer retraso de este tipo desde que el Gobierno de Biden ofreció todo su apoyo a Israel tras el ataque de Hamás del 7 de octubre.

La ofensiva israelí ha dejado 34.789 palestinos muertos, la mayoría civiles, en el conflicto, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.

La guerra comenzó cuando milicianos de Hamás atacaron Israel el 7 de octubre, matando a unas 1.200 personas y secuestrando a otras 250, de las que se cree que 133 permanecen cautivas en Gaza, según información israelí.

(Reporte de las oficinas de Reuters; Redacción de Cynthia Osterman; Edición de Michael Perry; editado en español por Tomás Cobos)