La iniciativa utilizará vídeos "prebunking" -diseñados para contrarrestar afirmaciones falsas antes de que se generalicen- que circularán por la plataforma YouTube de la empresa y otros sitios de medios sociales.

Los esfuerzos de Google por desafiar la propagación de la desinformación marcan un contraste con su rival Twitter, que está recortando sus equipos de confianza y seguridad, a pesar de que su nuevo propietario, Elon Musk, ha afirmado que no se convertirá en un "infierno de la batalla campal".

Google llevó a cabo recientemente un experimento en Europa en el que trató de contrarrestar las narrativas antirrefugiados en línea a raíz de la invasión rusa de Ucrania.

El experimento en la India será de mayor envergadura, ya que se ocupará de varias lenguas locales -bengalí, hindi y marathi- y abarcará diversos sectores de un país poblado por más de mil millones de personas.

"Esto nos brindaba la oportunidad de investigar el prebunking en un mercado no occidental del sur global", afirma Beth Goldman, responsable de investigación y desarrollo de Jigsaw.

Al igual que en otros países, la desinformación se extiende rápidamente por la India, sobre todo a través de las redes sociales, creando tensiones políticas y religiosas.

Funcionarios del gobierno indio han pedido a empresas tecnológicas como Google, Meta y Twitter que tomen medidas más contundentes contra la difusión de noticias falsas.

El Ministerio de Información y Radiodifusión (I&B) ha invocado en repetidas ocasiones "poderes extraordinarios" para bloquear canales de YouTube y algunas cuentas de Twitter y Facebook, supuestamente utilizadas para difundir información errónea perjudicial.

Los mensajes incendiarios también se han difundido a través del servicio de mensajería de Meta, Whatsapp, que cuenta con más de 200 millones de usuarios en la India. En 2018, la empresa frenó el número de veces que se podía reenviar un mensaje, después de que unas afirmaciones falsas sobre secuestradores de niños provocaran palizas masivas a más de una docena de personas, algunas de las cuales murieron.

Trabajando en colaboración con la Fundación Alfred Landecker, una organización prodemocrática con sede en Alemania, la empresa de inversión filantrópica Omidya Network India y una serie de socios regionales más pequeños, Jigsaw ha producido cinco vídeos en tres idiomas diferentes.

Después de ver los vídeos, se pedirá a los espectadores que rellenen un breve cuestionario de opciones múltiples, diseñado para calibrar lo que han aprendido sobre la desinformación. Una investigación reciente de la empresa sobre el tema sugirió que los espectadores tenían un 5% más de probabilidades de identificar la desinformación después de ver esos vídeos.

La iniciativa india se centrará en temas que resuenen en el país, añadió Goldman.

"Previniendo a las personas y equipándolas para detectar y refutar argumentos engañosos, ganan resistencia a ser engañadas en el futuro".

Se espera que los resultados se publiquen en el verano de 2023.