Las acciones australianas retrocedieron el jueves, arrastradas por las pérdidas de los valores relacionados con las materias primas, mientras los inversores esperaban con impaciencia los datos de inflación de EE.UU. que se publicarán el viernes en busca de nuevas pistas sobre la senda de la política monetaria de la Reserva Federal.

El índice S&P/ASX 200 cayó un 0,4% a 7.506,30 a las 2330 GMT y se encaminaba a su peor día desde el 5 de diciembre, retrocediendo desde el máximo de cierre de 10 meses alcanzado el miércoles.

Las bolsas estadounidenses cerraron a la baja el miércoles después de que una abrupta caída en picado a media tarde pusiera fin al impresionante repunte de Wall Street impulsado por la caída de los tipos de interés y el giro moderado de la Fed.

En Sídney, las mineras de peso lideraron la caída, cediendo un 0,9% en lo que podría ser su peor día desde el 5 de diciembre, si se mantienen las pérdidas. BHP Group y Fortescue cayeron un 1,4% y un 1,1%, respectivamente.

Las acciones auríferas cayeron un 1,2% y se encaminaban a su peor jornada desde el 13 de diciembre, tras el descenso de los precios de los lingotes durante la noche. Northern Star Resources cayó un 1%, mientras que Evolution Mining cedió un 0,3%.

El sector financiero, sensible a los tipos, retrocedió un 0,3%, encaminándose a su peor jornada desde el 27 de noviembre. Los "Cuatro Grandes" bancos cayeron entre un 0,1% y un 0,7%.

Los valores energéticos perdieron un 0,4%, y Santos, el principal productor de energía del país, bajó un 0,3%.

Los valores tecnológicos cayeron un 0,7% y se encaminaban a su peor jornada desde el 1 de diciembre. Xero cotizó un 0,4% a la baja.

Por su parte, los valores del sector sanitario subieron un 0,1%, ampliando las ganancias por décima sesión consecutiva.

El índice de referencia neozelandés S&P/NZX 50 cedió un 0,1% hasta los 11.565,06 puntos. (Reportaje de Adwitiya Srivastava en Bengaluru; edición de Subhranshu Sahu)