Las acciones australianas ampliaron las pérdidas el viernes, cayendo más de un 1%, mientras Wall Street caía durante la noche después de que el presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Jerome Powell, dijera que podrían estar justificadas subidas adicionales de los tipos de interés.

El índice S&P/ASX 200 cayó un 1,4% a 6.887,6 a las 2350 GMT, con la mayoría de los principales sectores cotizando en territorio negativo. El índice de referencia iba camino de su peor semana desde el 22 de septiembre.

Los tres principales índices bursátiles estadounidenses cerraron a la baja, ya que las declaraciones de Powell parecieron contrarrestar las expectativas del mercado de que el ciclo de subidas de tipos del banco central había llegado a su fin.

El jueves, los datos mostraron que el empleo en Australia subió menos de lo esperado en septiembre, tras un resultado extraordinario el mes anterior, pero la tasa de desempleo siguió bajando, en una señal de que el mercado laboral sigue siendo tímido.

Los inversores esperan ahora el crucial informe sobre la inflación del tercer trimestre, el 25 de octubre, para calibrar las perspectivas de subidas de tipos del Banco de la Reserva de Australia.

"Por ahora, nuestra expectativa sigue siendo que el RBA está en una pausa prolongada, aunque el riesgo de que los tipos suban este año o a principios del próximo ha aumentado", dijeron los analistas de ANZ en una nota.

Las mineras pesadas lideraron las pérdidas con una caída del 1,9%, con las principales Rio Tinto y Fortescue bajando un 1,5% y un 1,4%, respectivamente.

Las acciones de Lynas Rare Earths bajaron un 1,7% después de que la empresa dijera que se produciría un cierre programado de todas sus operaciones en Malasia, excepto su planta mixta de procesamiento de carbonato de tierras raras, en el trimestre de diciembre.

Los valores financieros bajaron un 1,2%, y los "cuatro grandes" bancos cayeron entre un 0,9% y un 1,4%. Los valores tecnológicos cayeron un 1,1%. Xero y Computershare cayeron un 1% y un 0,9%, respectivamente.

A contracorriente, los valores energéticos ganaron un 0,2%, mientras que los del oro sumaron un 0,1%.

En Nueva Zelanda, el índice de referencia S&P/NZX 50 cayó alrededor de un 1% hasta los 11.026,39 puntos.