4 oct (Reuters) - El gobierno ruso está dispuesto a levantar la prohibición de exportar diésel en los próximos días, informó el miércoles el diario Kommersant, citando fuentes no identificadas, mientras que el viceprimer ministro Alexander Novak dijo que las restricciones están funcionando.

Pese a ser uno de los principales productores de petróleo del mundo, Rusia ha sufrido altos precios internos y escasez de gasolina y diésel en los últimos meses, ya que los altos valores de exportación hicieron ventajoso para las refinerías vender sus productos en el extranjero.

"Esta medida tuvo un impacto positivo en la situación del mercado interno. Durante este período nuestras reservas aumentaron en aproximadamente 430.000 toneladas", dijo Novak al canal de noticias Rossiya-24 TV.

También afirmó que había mantenido una reunión con los productores de petróleo rusos más temprano en el día.

"Estamos observando una disminución significativa de los precios al por mayor de los productos petrolíferos en casi todas las regiones. Éste es el criterio que había que alcanzar", dijo Novak, sin indicar cuándo se levantará la prohibición de exportación.

La agencia de noticias TASS, en tanto, citó al ministro de Energía, Nikolai Shulginov, diciendo que el gobierno había estado discutiendo el permiso parcial para las exportaciones de combustible "en todos los niveles".

Según indicó, en un futuro próximo se publicarán más decisiones sobre la regulación del mercado de combustibles.

Kommersant informó que la prohibición sólo se levantaría para las exportaciones de diésel por gasoducto y los volúmenes podrían estar sujetos a cuotas para evitar subidas repentinas de los precios mayoristas. La prohibición de exportar gasolina seguirá en vigor por ahora, agregó.

El diésel es el mayor producto de exportación petrolero ruso, con casi 35 millones de toneladas el año pasado. Exportó 4,8 millones de toneladas de gasolina.

Novak dijo la semana pasada que Rusia podría introducir cuotas a las exportaciones de combustible si la prohibición total de los suministros transfronterizos impuesta el 21 de septiembre no logra reducir los elevados precios de la gasolina y el diésel.

Los precios han caído en el mercado local desde que se introdujo la prohibición; la gasolina casi un 10% y el diésel un 21%.

Las instalaciones de almacenamiento del monopolio ruso de oleoductos Transneft están casi agotadas y redirigir los volúmenes adicionales al mercado nacional resultaba casi imposible, según Kommersant.

Novak dijo el martes que el Gobierno no fijaba ningún plazo para la prohibición de exportar combustible.

Las expectativas sobre la duración de las medidas varían. JP Morgan dijo que podría durar un par de semanas hasta que concluya la temporada de cosecha en octubre, mientras que FGE Energy dijo que reponer las existencias de gasolina de Rusia podría llevar hasta dos meses.

(Reporte de Lidia Kelly en Melbourne y Vladimir Soldatkin en Moscú; editado en español por Benjamín Mejías Valencia y Manuel Farías)