La adquisición necesita la aprobación de los reguladores mexicanos, dijo Carso en su comunicado.
La filial mexicana de Talos Energy, con sede en Houston, que descubrió Zama en 2017, controla el 17,4% del yacimiento potencialmente lucrativo en aguas territoriales mexicanas del Golfo de México. El proyecto es ahora operado por la petrolera estatal Pemex, después de obtener el visto bueno para dirigir las operaciones por parte del Ministerio de Energía de México tras una prolongada lucha sobre qué empresa dirigiría el proyecto.
Pemex posee los derechos de un bloque vecino que se cree que comparte las riquezas petrolíferas de Zama, uno de los mayores hallazgos de petróleo en México en años.
Carso dijo que adquirirá el 49,9% de la unidad Talos, y hará dos pagos para comprar la participación minoritaria, uno primero de 74,85 millones de dólares cuando se cierre el trato, y luego un segundo pago de 49,9 millones de dólares una vez que comience la producción comercial de Zama.
El cierre de la compra está previsto para el tercer trimestre de este año, según un comunicado de Talos del jueves.
"Grupo Carso participará activamente con Talos para lograr la ejecución más eficiente del proyecto junto con Pemex y los demás miembros del consorcio", dijo Carso en su comunicado.
El consorcio liderado por Talos en Zama también incluye a la europea Wintershall DEA, que tiene una participación de 19.8%, y a Harbour Energy, que tiene 12.4%. Pemex posee el 50,4%.
Carso señaló que está realizando la compra a través de su unidad Zamajal. (Reportaje de Carolina Pulice; Edición de Anthony Esposito y David Gregorio)
