Los precios del petróleo y del gas natural han caído desde los máximos alcanzados en 2023, ya que la ralentización del crecimiento mundial y una recuperación económica en China más débil de lo esperado han lastrado la demanda.

La mayor parte del sector energético pasará apuros debido a los bajos precios, y la demanda de gas natural licuado (GNL) se verá afectada por la debilidad de la producción industrial mundial, afirmó Mathan Somasundaram, consejero delegado de Deep Data Analytics, quien añadió que Woodside y Santos eran ejemplos clásicos.

Se espera que Woodside informe de un beneficio neto subyacente después de impuestos (NPAT) de 3.270 millones de dólares para 2023, según UBS.

Esta cifra es inferior a los 5.230 millones de dólares contabilizados el año pasado, cuando el beneficio de la empresa energética alcanzó un máximo histórico tras la incorporación de la rama petrolera del grupo BHP a la cartera de activos de Woodside y la subida de los precios del GNL.

La semana pasada, Woodside también señaló un deterioro de activos no monetario después de impuestos de unos 1.200 millones de dólares de su yacimiento de petróleo y gas Shenzi para sus beneficios fiscales de 2023.

Según UBS, se espera que Santos, su rival más pequeño, presente un beneficio neto subyacente de 1.490 millones de dólares, inferior a los 2.460 millones del periodo del año anterior.

El beneficio de Santos fue mayor el año pasado debido a unos precios más fuertes y después de que su fusión con Oil Search reforzara su cartera de GNL.

"Con los ingresos anunciados de antemano para las compañías de petróleo y gas, los costes siguen siendo la gran incógnita y podrían suponer un riesgo a la baja para los beneficios futuros", escribieron los analistas de Jarden.

"Si las perspectivas de crecimiento presentadas parecen turbias o inciertas, las acciones de la empresa pueden venderse en consecuencia", afirmó Tim Waterer, analista jefe de mercados de KCM Trade.

Se espera que Santos y Woodside publiquen sus resultados anuales el 21 y el 27 de febrero, respectivamente.

A principios de este mes, ambas empresas desecharon una propuesta de fusión de 52.000 millones de dólares. Los analistas afirmaron que los accionistas se centrarán en lo que harán las empresas a continuación.

"Esperamos que los inversores interroguen a la dirección sobre si la empresa buscará otros medios para crear valor para los accionistas al margen de la realización de los actuales proyectos de crecimiento", escribieron los analistas de Jarden refiriéndose a Santos.