La minera chilena Antofagasta Minerals inauguró el jueves una planta desalinizadora de más de 2.000 millones de dólares para su mina de cobre insignia en Chile, Los Pelambres, destinada a aliviar los efectos de la grave sequía que ha afectado a la producción.

La mina es la primera que opera con agua desalinizada en una zona del país que ha sufrido una sequía de 15 años, succionando agua de los embalses y desatando la preocupación por el suministro de agua dulce.

El presidente chileno, Gabriel Boric, elogió el proyecto, afirmando que la situación en la región de Coquimbo, donde se encuentra Los Pelambres, es preocupante.

"Especialmente con la crisis del cambio climático, debemos ser no sólo un país minero, sino también un país a la vanguardia de la minería responsable y sostenible", dijo en la inauguración de la planta, que se encuentra en la costa de Los Vilos, una ciudad de Coquimbo.

Antofagasta comenzó la construcción de la planta en 2019, y planea bombear 400 litros de agua por segundo para su uso en Los Pelambres, ubicada a unos 55 km tierra adentro.

La empresa planea suministrar otros 400 litros de agua por segundo en una segunda fase cuya finalización está prevista para 2027, lo que, según afirma, aliviaría la presión sobre el cercano río Choapa.

La histórica sequía de Chile ha afectado a casi todos los aspectos de la vida en la nación que es el primer productor mundial de cobre. Las empresas mineras de las afueras de Coquimbo ya están utilizando agua de mar, sobre todo en Antofagasta, una región desértica del norte que alberga la mayor parte de la actividad minera de Chile. (Reportaje de Natalia Ramos y Alexander Villegas; Edición de Daina Beth Solomon y David Evans)