Forward Water Technologies Corp. anuncia que ha seguido ampliando el uso de su tecnología patentada para desarrollar nuevos tratamientos para la industria alimentaria y de bebidas. Las recientes investigaciones en los laboratorios de Forward Water han ilustrado un concepto pendiente de patente que ahora se está ampliando a niveles de demostración de ingeniería.

Mientras se centra en las sólidas pistas comerciales para el tratamiento del agua, la reutilización y la gestión de salmueras, las capacidades de concentración en frío de la ósmosis frontal ("FO"), junto con el uso de un sorteo de FO reciclable de baja energía, tiene el potencial de hacer nuevos extractos y aromatizantes únicos de alta calidad para el sector de la alimentación y las bebidas. Con esta nueva solución tecnológica, se podrá explorar todo un nuevo mundo de concentrados alimentarios garantizando que la calidad y el sabor de los concentrados naturales sean casi idénticos a los de los productos originales frescos, al tiempo que se consigue una mejor huella de carbono. En muchos sectores, como el de la alimentación y las bebidas, los aromas y sabores volátiles se pierden con el procesado y hay varios factores que contribuyen a esas pérdidas, como los tratamientos térmicos.

Obtener un concentrado de calidad deseable puede convertirse en un reto cuando los consumidores dan mucha importancia al sabor y al olor, ya que su pérdida no puede evitarse por completo. Debido a estas pérdidas, se hace necesario recuperarlas para mejorar la calidad del producto y mantener su atractivo para el consumidor. Con la FO, estas pérdidas son Esta tecnología patentada ofrece más beneficios que el mero aumento de la calidad de los concentrados de alimentos y bebidas, sino que también desempeña un papel impactante en el medio ambiente.

Con el uso de esta nueva solución tecnológica se produce un efecto directo en la huella de carbono del fabricante, tanto en el proceso de fabricación como en la emisión de gases de efecto invernadero. Mediante el uso de esta nueva tecnología, en comparación con el actual proceso de fabricación por evaporación térmica de los concentrados actuales, se reconocerá un gran ahorro de energía y, por tanto, una reducción de la huella de carbono asociada. Los concentrados también requieren mucha menos energía para su transporte, lo que se correlaciona directamente con la reducción de CO2.