La industria naviera transporta cerca del 90% del comercio mundial y es responsable de casi el 3% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono; y la instalación de motores de barco que quemen combustibles más limpios podría ayudar a frenar la tendencia al calentamiento global.

La Organización Marítima Internacional (OMI) ha fijado un objetivo de emisiones netas nulas de gases de efecto invernadero en torno a 2050, para lo cual son clave los combustibles más limpios como el amoníaco.

Las dos empresas han firmado un memorando de entendimiento para explorar las opciones de propiedad y explotación de buques propulsados por amoníaco y también estudiarían el uso de metanol y dispositivos de ahorro energético en la industria marítima, declaró Itochu.

En toda la región de Asia-Pacífico, países desde Malasia e Indonesia hasta India y Corea del Sur están realizando pruebas de combustión conjunta de amoníaco en centrales eléctricas que utilizan combustibles fósiles, y en muchos proyectos participan inversores japoneses.

El año pasado, Itochu acordó estudiar el desarrollo de un centro de bunkering de amoníaco en Algeciras, en el estrecho de Gibraltar (España), como parte de sus esfuerzos por establecer una cadena de suministro mundial de amoníaco.

En el sector energético, el principal generador de energía de Japón, JERA, planea cocombustión de un 20% de amoníaco con carbón en su central térmica de Hekinan, en lo que dijo será la primera prueba del mundo utilizando una gran cantidad del gas en una planta comercial importante.