El banco de desarrollo BNDES podrá aplazar 22.600 millones de reales (4.610 millones de dólares) en pagos de préstamos al Tesoro de Brasil, dijo el miércoles el Tribunal de Cuentas del país (TCU), ampliando los pagos en ocho plazos hasta 2030.

Inicialmente, el pago debía realizarse en su totalidad el 30 de noviembre. El plan de plazos resultó de un acuerdo entre el banco y el Ministerio de Hacienda bajo la administración del presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.

El director general del BNDES, Aloizio Mercadante, dijo en un comunicado que el permiso del tribunal de auditoría para el aplazamiento "garantiza la redención histórica del banco como uno de los principales motores del desarrollo nacional."

Mercadante ha sostenido sistemáticamente que la función principal del banco no es financiar al Tesoro, sino apoyar las iniciativas de industrialización del país y financiar proyectos en el marco del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), centrado en sectores como la energía, la logística y las infraestructuras sociales y urbanas.

Durante los gobiernos del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) de 2008 a 2014, el Tesoro brasileño transfirió 440.000 millones de reales al banco de desarrollo, lo que tensó las finanzas públicas y desplazó a los prestamistas comerciales de los mercados de capitales.

En los últimos años, el banco ha seguido una política de devolución de estos préstamos al Tesoro. (1$ = 4,9024 reales) (Reportaje de Marcela Ayres; Edición de Josie Kao)