El Banco de Japón destacará en un informe a finales de este mes cómo se están ampliando las subidas salariales en todas las empresas, incluso en las más pequeñas, dijeron fuentes familiarizadas con su pensamiento, una medida que ayuda a argumentar a favor de una subida de los tipos de interés a corto plazo.

Las conclusiones, que figurarán en un anexo de un informe regular trimestral que analiza las economías regionales japonesas, se basarán en encuestas y audiencias realizadas por las sucursales del banco central en todo el país.

Tanto el informe principal como el anexo destacarán probablemente cómo un número cada vez mayor de pequeñas y medianas empresas están subiendo los salarios, dijeron tres fuentes, una señal de la ampliación de los aumentos salariales que son un requisito previo para subir los tipos de interés.

Los resultados serán algunos de los factores que el Banco de Japón examinará en su próxima reunión de fijación de políticas los días 30 y 31 de julio, cuando la junta emitirá nuevas previsiones trimestrales de crecimiento e inflación.

El informe regional del BOJ se publicará el lunes, cuando sus directores de sucursal celebren una reunión trimestral en Tokio. El anexo se publicará probablemente en una fecha posterior, dijeron las fuentes.

El BOJ puso fin en marzo a ocho años de tipos de interés negativos al considerar que el aumento de los salarios probablemente mantendrá la inflación de forma sostenible en torno a su objetivo de inflación del 2%. Los precios subyacentes al consumo subieron un 2,5% en mayo respecto al año anterior, manteniéndose por encima del objetivo del BOJ durante más de dos años.

El gobernador del BOJ, Kazuo Ueda, ha señalado la posibilidad de más subidas de tipos si los aumentos salariales se amplían y empujan a las empresas a subir los precios de los servicios, impulsando así la inflación subyacente hacia el 2%.

Muchos agentes del mercado esperan que el BOJ suba los tipos de interés desde los actuales niveles cercanos a cero este año, aunque están divididos sobre si ocurrirá este mes o más adelante.

Una encuesta publicada el miércoles por el mayor sindicato japonés, Rengo, mostraba que las empresas ofrecían subir los salarios un 5,10% de media, el mayor incremento en tres décadas, este año.

Pero el aumento salarial de las pequeñas empresas, del 4,45%, fue inferior a la subida del 5,19% ofrecida por sus homólogas más grandes. Existe incertidumbre sobre si las empresas mucho más pequeñas, que no están incluidas en la encuesta Rengo, son capaces de subir los salarios.

La red de sucursales del BOJ, donde los funcionarios hablan regularmente con los ejecutivos de las empresas locales, permite al banco central captar si las subidas salariales se están extendiendo entre las pequeñas empresas regionales.

Alrededor del 70% de los trabajadores japoneses están empleados en pequeñas y medianas empresas (PYME), lo que hace que sus movimientos salariales sean clave para juzgar si la inflación alcanzará de forma duradera el objetivo del 2% del BOJ.